Política

Alcorcón

La peor herencia

La Razón
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Nada más tomar posesión en la Alcaldía de Alcorcón, hace dos años, la primera decisión que adoptamos fue mirar hacia adelante y marcarnos objetivos muy exigentes de saneamiento económico, de atracción de inversión e impulso a la ciudad. No era fácil, porque la herencia encontrada era una de las cuatro peores de España, con una deuda once veces superior a la reconocida por el PSOE, hasta entonces en el Gobierno municipal. Dos años después, hemos transformado el déficit crónico en superávit, el impago generalizado de facturas en el abono de 13.000 de ellas por valor de 182 millones de euros y el derroche permanente en una política de austeridad. Todo ello ha permitido priorizar el apoyo a la familia y a los mayores, el fomento del empleo, el bienestar social, la seguridad de los vecinos y el cuidado de la ciudad. Atrás quedaron gastos descomunales en propaganda (700.000 euros), los constantes viajes de los socialistas (más de 200) y las obras caprichosas y faraónicas (como un circo gigantesco que llevó a la práctica quiebra al municipio). Actualmente, Alcorcón está volcado en el futuro a partir de ese equilibrio económico, la recuperación de la confianza y el diálogo con los vecinos para convertir a nuestra ciudad en la locomotora económica y laboral de la región más competitiva y dinámica de España.