Región de Murcia

El PP pide a Ciudadanos «sentarse a negociar»

La formación naranja escenifica con rotundidad su apuesta por apartar a Pedro Antonio Sánchez de la presidencia del Gobierno de la Comunidad

El presidente, Pedro Antonio Sánchez, junto al alcalde de Lorca, Francisco Jódar, en el pregón de Semana Santa
El presidente, Pedro Antonio Sánchez, junto al alcalde de Lorca, Francisco Jódar, en el pregón de Semana Santalarazon

La formación naranja escenifica con rotundidad su apuesta por apartar a Pedro Antonio Sánchez de la presidencia del Gobierno de la Comunidad

Ninguna de las formaciones políticas con representación en la Asamblea Regional se atreve a aventurar lo que ocurrirá la semana que mañana comienza y en la que se debatirá la moción de censura que los socialistas han presentado contra el presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez. Las negociaciones se libran en Madrid, donde las direcciones de cada uno de los partidos llevan directamente las conversaciones.

Ayer, el coordinador general del PP, Fernando Martínez Maillo, reclamó a Albert Rivera «moderación» y que «se siente a negociar» con su partido porque, según dijo, «todavía hay tiempo de volver al pacto». Por primera vez, algunos en las filas de los populares murcianos, recogieron el mensaje como un indicio de que pueden dejar caer al presidente para mantener el Gobierno en la Región.

Los dirigentes de Ciudadanos y, especialmente, Miguel Sánchez, han mostrado con rotundidad su intención de no abandonar en su empeño de que el jefe del Ejecutivo abandone su puesto para dar paso a otro líder de la formación azul. La persona elegida no le importa. Solo exige que PAS se vaya porque, tal y como señala en cada una de sus intervenciones públicas, «ha incumplido» el pacto firmado entre ambas formaciones.

Echar al presidente es su objetivo principal, y por ello se está escenificando un pacto con el Partido Socialista que nunca podrá llevarse a cabo, dado que los intereses de ambas formaciones son totalmente diferentes.

La condición de la convocatoria de nuevas elecciones es el punto de la controversia. Los socialistas no están dispuestos a iniciar un proceso electoral en el ecuador de la legislatura. No solo por una cuestión de ambición política, como es el caso de Rafael González Tovar que durante años ha soñado con llegar a ser presidente de la Región, sino porque las bases del partido, sobre todo los líderes municipales que gobiernan en los ayuntamientos, no están dispuestos a arriesgar su gestión y a interrumpir le ejecución de los presupuestos.

Ciudadanos hoy por hoy no tiene ese problema. En el PSOE son conscientes también de la imposibilidad de modificar el Estatuto, por lo que el requisito de convocar elecciones para cuatro años, impuesto por el secretario general de los socialistas murcianos, es imposible de cumplir.

La Gestora socialista ha iniciado conversaciones con Cs, aunque desde Murcia consideran, que no con demasiado interés, dado que la mayor parte del Comité Regional no apoya la estrategia orgánica seguida desde Madrid. Pero tampoco ven con malos ojos la posibilidad de conseguir un Gobierno regional, de ahí los contactos.

Por su parte, los de Albert Rivera no quieren ni oír hablar de la posibilidad de compartir un Gobierno con Podemos. Por eso estarían dispuestos a negociar con el Partido Popular, tal como sugirió ayer Maillo. Parece que la fortaleza en su postura de Miguel Sánchez tiene mucho que ver. Los dos líderes regionales se conocen bien. Ambos comparten muchos años en la política donde coincidieron cuando el portavoz de la formación naranja era presidente del Consejo de la Juventud y Pedro Antonio Sánchez director general del área.

La mayoría de los líderes consultados coinciden en que la moción de censura no prosperará. Pero los argumentos de cada uno son diferentes. Unos aseguran que Pedro Antonio Sánchez aguantará el envite, convencido de que Cs no la apoyará. En ese caso podría seguir como presidente de la Comunidad el resto de lo que queda de legislatura. Incluso si el TSJ decide en su contra, dado que sería muy improbable el poder presentar una nueva moción de censura. Estos mismos hablan de la personalidad del presidente que, «de ninguna manera» quiere renunciar.

El resto cree que Pedro Antonio Sánchez, renunciará en el último momento, incluso después de responder al discurso de Rafael González Tovar, en el que todas las consejerías están trabajando para mantener la sensación de normalidad exigida. Es decir, podría renunciar poco antes de la votación prevista para el jueves, 6. Todo depende de la negociación entre PP y Cs en Madrid. Por eso Miguel Sánchez se mantiene firme.