Madrid

El 25% de los votantes de Ciudadanos se fuga al PP y sólo el 1,6% a Vox

Los electores de Ayuso y Monasterio, los más satisfechos: el 89% de los votantes populares de mayo y el 87% de los que apoyaron a los de Abascal en esta región volverían a hacer en unas elecciones anticipadas

El líder de Ciudadanos en Madrid, Ignacio Aguado (d), y la portavoz de Vox en Madrid, Rocío Monasterio, en una imagen de archivo
El líder de Ciudadanos en Madrid, Ignacio Aguado (d), y la portavoz de Vox en Madrid, Rocío Monasterio, en una imagen de archivolarazon

Del análisis del trasvase de votos que, según la encuesta realizada por NC Report para este diario, se produce entre los diferentes partidos destaca una primera conclusión: los electores del PP y de Vox son, con diferencia, los más fieles o los más satisfechos con la decisión que tomaron en las elecciones de mayo de 2019.

De hecho, caso 9 de cada 10 de los vecinos de la región que en esa fecha apostaron por Díaz Ayuso para liderar el Gobierno regional, lo seguirían haciendo a día de hoy. En concreto, el 89,4%. En el caso de Vox, el porcentaje de fidelidad al partido es similar: el 87,5% de quienes introdujeron la papeleta encabezada por Rocío Monasterio harían lo mismo ahora en el caso de que se celebrasen unas elecciones anticipadas.

Unos puntos por debajo, aunque por encima del umbral del 80% se encuentra el nivel de fidelidad de los votantes socialistas. El 81,4% de los que apostaron por Ángel Gabilondo reeditarían ahora ese apoyo. Entre los otros dos partidos de izquierdas, el porcentaje es el mismo en ambos: el 71%.

El partido que sale peor parado de este análisis es Ciudadanos. En las elecciones de mayo de 2019 fue la tercera fuerza y se quedó a tan sólo cuatro diputados de «sorpassar» al PP. Parece muy lejano ya aquel escenario. Según los datos de la encuesta de NC Report, sólo el 53,3% de los que apoyaron a Ignacio Aguado como su candidato a presidente regional volverían a hacerlo en el contexto actual.

Es, por tanto, el partido naranja el que sufre mayores fugas de voto. En concreto, cuatro vías de agua. La más importante es la protagonizada por electores que votaron a Ciudadanos en mayo de 2019 y ahora apostarían por el PP de Díaz Ayuso. Ocurre eso con el 25,9% de los electores naranjas de hace un año. El segundo escape de votantes de dimensiones importantes es el que tendría como destino la abstención: hasta un 12,7% de los antiguos votantes de Cs se quedaría ahora en casa. Un 6,5% apoyaría al PSOE y apenas el 1,6% optaría por votar a Vox, circunstancia ésta que viene a dar la razón a los análisis de expertos que minimizan la fuga de electores desde las filas de Inés Arrimadas hacia las de Santiago Abascal.

Del PSOE a la abstención

El resto de partidos sufren trasvases de votos más asumibles teniendo en cuenta que apenas han pasado 16 meses desde la cita con las urnas. El PSOE, que se convirtió en la primera fuerza de la región en esas elecciones, apenas sufre fugas hacia otras formaciones. La más importante concierne al 2,7% de sus antiguos electores y tendría como destino Ciudadanos. La principal preocupación de la dirección socialista en Madrid debería ubicarse en aquellos que optarían ahora por quedarse en casa: hasta 9 de cada 100 de sus votos podrían ir a la abstención.

En el caso del PP, un 4,9% de sus antiguos electores apoyaría ahora a Ciudadanos y un 1,3% cambiaría su preferencia de 2019 por Díaz Ayuso y en unas eventuales elecciones anticipadas votaría a Vox. En lo que afecta a la formación de Rocío Monasterio, un 5,9% pasaría a apoyar al PP y un 3,1% a Cs.

Entre los grupos de izquierdas llamados a ser socios del PSOE si en algún momento logran rebasar la barrera de los 67 escaños, llama la atención sus vasos comunicantes: el 13,8% de los que apoyaron a Podemos, respaldarían ahora a Más Madrid; y sólo el 5,5% de los que apostaron por marca morado se «cambiarían» a la formación fundada por Manuela Carmena e Iñigo Errejón.