La Policía Nacional acompañará a los repartidores de estufas atacados en la Cañada Real

Unidades especializadas de la Policía Nacional acompañarán al dispositivo humanitario desplegado en la Cañada Real Galiana para evitar amenazas, coacciones y lanzamientos de piedra que están recibiendo por parte de algunos vecinos de la zona.

Y todo, después de que el consejero madrileño de Interior, Justicia y Víctimas, Enrique López, hubiese pedido por carta al delegado del Gobierno, José Manuel Franco, que refuerce la presencia de las fuerzas y cuerpos de seguridad en la Cañada Real ante las “coacciones, amenazas y agresiones físicas” que están sufriendo las personas que están repartiendo estufas y bombonas de gas.

Desde la Consejería de Interior han explicado que el dispositivo de reparto de alimentos y mantas comenzó la semana pasada con la colaboración del Ayuntamiento de Madrid y, desde este lunes la empresa energética, Naturgy, y la consejería de Vivienda, a través del comisionado de la Cañada Real, han comenzado a repartir estas estufas.

Según apunta López en su carta, en las últimas horas, los trabajadores que están realizando este reparto están empezando a sufrir agresiones físicas con lanzamiento de piedras y levantamiento de barricadas que, no sólo les impiden llevar a cabo su trabajo, sino que están poniendo en peligro su integridad personal.

Desde la Consejería le han transmitido que no hay presencia policial suficiente para asegurar la integridad de estos trabajadores, y por ello han pedido este refuerzo a Franco.

El sector 6 de la Cañada Real está prácticamente abierto, y los sectores 2 al 5 se espera que lo estén hoy con efectivos de Protección Civil.