Telecomunicaciones

Almudena Trigo: «La ciencia puede cambiar la industria de nuestro país con empleos cualificados y valor competitivo»

Ingeniera de Telecomunicaciones y doctora en Biología Molecular, decidió crear BeAble Capital, una gestora que invierte en tecnologías científicas

Almudena Trigo, Ingeniera de Telecomunicaciones y Doctora en Biología Molecular.
Almudena Trigo, Ingeniera de Telecomunicaciones y Doctora en Biología Molecular.Enrique CidonchaLa Razón

La vocación de Almudena Trigo se comenzó a intuir desde que era pequeña. Era menos claro que el caso de sus compañeros que querían ser médicos y salvar vidas; ella veía un problema y buscaba la solución. Que a su abuelo le dolía algo y le costara andar, ella se planteaba ser fisioterapeuta; que había pocas mujeres aviadoras, ella divagaba sobre cruzar los cielos. «Quería hacer algo que yo creyera que servía», reconoce.

Por ese motivo, en su carrera ha rellenado un puzzle de conocimiento: es Ingeniera de Telecomunicación, Doctora en Biología Molecular y Máster en Desarrollo Ejecutivo. Un recorrido en ocasiones, arduo. «El primer día en la facultad el profesor nos dijo que teníamos que hacer un programa de ordenador y yo nunca había cogido uno, así que le pregunté si nos iba a enseñar. Me respondió: “Señorita, ¿usted dónde piensa que se ha metido? Está en una ingeniería, así que ingénieselas”».

Se lo tomó como lema de vida y creó BeAble Capital, una gestora que invierte en las mejores tecnologías surgidas de centros de investigación y universidades. Las acompaña desde fases muy tempranas, para que puedan dar el salto del laboratorio a la industria. «La clave es entender lo que hacen», resume en la sede. Gracias a eso, ha fundado cerca de 30 compañías españolas procedentes en los ámbitos de la nanotecnología, materiales avanzados, fotónica, entre otros, y ha aumentado la generación de empresas industriales de base científica en España en más de un 10%.

Ella conoce bien el sector, trabajó en el Centro Nacional de Biotecnología (CNB - CSIC), en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y en el Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES), en Francia. «La ciencia me apasiona y me sentía afortunada, pero más me llenaba hacer algo realmente útil», comenta.

Como en sus primeras aspiraciones, se topó con las trabas de presentar un proyecto a inversores y quiso resolverlo. «Cuando lo explicaba no hablaba de nanotecnología, solo de producto, mercado y oportunidad». Y aun así, como estaban en fases tan tempranas, al preguntarle por las ventas, ella les decía que había que escalar y le respondían que les llamara entonces, como un bucle infinito al que ella quiso poner fin con BeAble Capital.

«La ciencia puede cambiar la industria de nuestro país con empleos cualificados y valor competitivo», sentencia. «En España tienen un peso muy grande el turismo y la construcción, y es estupendo, pero hay que diversificar», prosigue. Ella y su equipo en 5 años han analizado más de 1.000 proyectos y han trabajado con más de 100 centros de investigación de universidades.

Lo más importante es que sean de «Deep Science», proyectos que se llevan gestando durante años. Intentan ver cuáles son las tecnologías que cubran las necesidades que afecten a la rutina. Uno de esos casos es el de ADParticles, una empresa que hace un filtro solar. «Son cremas que nos echamos todos los días. Lo que se intenta es que tengan una alta cobertura y no destrocen al medioambiente». Se refiere a que en lugares como Hawái, el hecho de untarse con protección y lanzarse al mar, perjudica a la flora marina.

Referentes para enorgullecerse

El año pasado el gobierno eligió a Almudena Trigo como una de las «Mujeres Referentes del Emprendimiento Innovador». A su profesión se le suma que es miembro de la Junta Directiva de la Asociación Española de Capital Privado (ASCRI) y del jurado del programa EIC Accelerator (de innovación de la Comisión Europea).

El reconocimiento lo agradece, por distinguirla y por lo que supone. «Es muy importante visibilizar ejemplos de mujeres en carreras de ciencias, que han visto en ellas su pasión y que puedan servir para que otras personas se motiven y quieran emprender este tipo de camino».

Lo que la presidenta de BeAble Capital ve en un modelo a seguir es que puede transformar de manera positiva. «Un caso claro fue Rafael Nadal este domingo. Yo lo estaba viendo con mis hijos y me sentí afortunada por lo que nos enseñó». En las 5 horas y media de partido y con los dos primeros sets perdidos, el tenista español consiguió su 21º Grand Slam en una remontada histórica. «Hasta que no se acaba la última ronda se puede ganar y se debe luchar. Lo estaría pasando fatal y todo el mundo lo daba por perdido, pero para esto existen este tipo de cosas. Es a diferente nivel, pero la idea es transmitir que sí, que hay personas que lo logran».

– Muchos científicos formados en España deciden emigrar para encontrar un trabajo digno, ¿por qué decidió quedarse usted?
– En España tenemos la suerte de que la familia es importante y queremos que los niños se críen con sus abuelos. Mucha gente quiere retornar y estar en su país con su gente y luchar por cambiar las cosas. Yo creo que se puede hacer mucho y hablo muy orgullosa de la capacidad de la ciencia española. Merece la pena luchar. Yo tengo ese concepto romántico. Quiero hacer algo por mi país y encima, tenemos todos los mimbres. Están todas las piezas, solo hay que juntarlas y sale la foto.