La Almudena brilla, pese a la amnistía

Bajo el lema «Reina y madre nuestra», la capital homenajeó ayer a su patrona, la Virgen de la Almudena. Lo hizo con una misa Mayor en la plaza junto a la catedral y el Palacio Real y una procesión posterior. Un homenaje más especial de la cuenta, ya que coincidía con el 75 aniversario de la coronación canónica de la Almudena. Presidida por el arzobispo de Madrid y cardenal, José Cobo, y concelebrada por los obispos auxiliares, los vicarios episcopales y el Cabildo, la eucaristía contó además con una amplia representación del presbiterio diocesano. En ella se habló de nostalgia, convivencia y el pesimismo que se respira en la sociedad actual.

En las últimas semanas, los españoles han vivido con preocupación el acuerdo que se estaba fraguando entre el PSOE y JuntsxCat y, en concreto, en la capital se ha reflejado en las multitudinarias manifestaciones celebradas las últimas noches en Ferraz. A la par que los madrileños disfrutaban de la festividad, se conocía el pacto para la investidura de Pedro Sánchez, lo que motivó que, en el día de la festividad de la patrona de Madrid, todos los representantes políticos que acudieron a la celebración se manifestaran sobre este asunto. Entre ellos, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso y el alcalde, José Luis Martínez-Almeida. La primera, realizó una declaración institucional poco después y, el segundo, anunció que convocará un pleno extraordinario el próximo viernes,17 de noviembre, para condenar el pacto.

Ya en la eucaristía, el regidor madrileño renovó el tradicional Voto de la Villa en el que pidió a la patrona de la capital que proteja y ayude a la Familia Real y a la princesa Leonor, que hace solo unos días llegó a la mayoría de edad, «para que sigan desempeñando la misión que les encomienda la Constitución como símbolo de la unidad de España». También, pidió amparo para Cobo, recientemente nombrado cardenal por el papa Francisco, para que «sirva» al pueblo de Madrid «con fidelidad», y también le demandó a la virgen que proteja a las familias madrileñas para que se mantengan unidas «y sean el espacio de amor en el que nazcan y crezcan los madrileños del futuro». El alcalde recordó la efeméride del Voto de la Villa, que tuvo lugar en 1948 en la Plaza de la Armería, después de que la imagen de la Virgen de la Almudena fuera trasladada desde la Colegiata de San Isidro, que por entonces ejercía de catedral provisional, hasta que el papa Juan Pablo II consagró la Catedral de la Almudena durante su cuarto viaje a España en 1993.

Posteriormente, el arzobispo subrayó que «vivimos tiempos extraños» de «profundos desencuentros» en los que «es fácil sentir la ira, la incomunicación y la dureza que se nos está instalando en la entraña». Además, hizo un llamamiento a la convivencia entre los pueblos, que es «la capacidad de salir de nuestro espacio para entrar en otro donde aprendemos a asumir diferencias» y ha abogado por no «demonizar al rival».

Tras la homilía, una procesión recorrió las calles de la capital. Concretamente, arrancó en la Plaza de la Almudena y pasó por las calles Bailén, Mayor, Santiago y Requena para volver por la calle Bailén al punto de partida. Portada por los anderos de la Hermandad de Jesús El Pobre, la imagen de la virgen estuvo acompañada en todo momento por la Banda Militar del Acuartelamiento del Ejército, la Banda de la Policía Municipal y la Banda de la Hermandad de Jesús El Pobre. De forma paralela, tuvo lugar en la plaza la tradicional ofrenda floral solidaria a la virgen. Miles de fieles honraron a La Almudena con flores y alimentos no perecederos en beneficio de Cáritas Diocesana y la Comunidad de Sant’Egidio.

Además de Madrid, la Virgen de la Almudena, es a su vez patrona del Gremio de Pasteleros de la Villa. Gremio que decidió convocar, en el año 1978, un concurso para crear un dulce en su honor. Fue así como nació un bollo, estilo rosca, que solo se hace en la capital y que cada vez cosecha más asiduos. Desde hace días, los pasteleros madrileños han estado vendiendo en sus establecimientos la corona de la Almudena pero cerca de tres mil personas que pasaron ayer por la Plaza Mayor pudieron probarla. Desde las 13:00 se repartió frente a la Casa de la Panadería porciones de una gran Corona de la Almudena de 19 metros de diámetro. Una actividad desarrollada en colaboración con la Asociación de Reposteros y Pasteleros de Madrid (ACYRE). Cada artesano pastelero tiene su receta y su toque personal, con pequeñas diferencias en los ingredientes de la masa o en la decoración exterior o el relleno, pero todas comparten la forma de corona y una miga tan suculenta y esponjosa como la del roscón, sin el característico agua de azahar.

Las celebraciones se prolongarán hasta el 18 de noviembre a las 20 horas, cuando se podrá disfrutar del último de los conciertos solidarios programados. Los beneficios obtenidos irán destinados a la Comunidad de Sant’ Egidio y correrán a cargo de la agrupación coral Iter. Los otros dos conciertos tendrán lugar el 4 y el 11 de noviembre a la misma hora. El primero de ellos será ofrecido por la Orquesta Sinfónica del Ayuntamiento de Madrid en favor de la obra de caridad de la Corte de Honor de la Almudena. El del día 11, a beneficio de Cáritas Diocesana de Madrid, estará interpretado por la Banda Militar del Acuartelamiento del Ejército.