El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha provocado una nueva controversia con sus declaraciones sobre el carril bus sin autobuses en la vía de servicio entre Móstoles y Alcorcón a cuenta de las obras de la A-5 y que están provocando atascos de 10 kilómetros, mientras el carril bus se encuentra prácticamente vacío.

Puente ha culpado a la Comunidad de Madrid y, en concreto, al Consorcio de Transportes, de ser el causante del “inventito” del carril bus. “Así consta en todas las actas del Consorcio, como te acredito. Como nos olíamos que nos ibais a cargar el muerto si salía mal, pedimos que se solicitase formalmente y, como puedes ver, así lo hizo la Consejería de Transporte el 14-11-24”, ha expuesto el ministro en la red social X.

Sus palabras han generado una rápida respuesta por parte del alcalde de Móstoles (PP), Manuel Bautista, quien ha salido al paso para matizar y rebatir lo expresado por el ministro. Según el regidor de la localidad del sur, la Administración que decide si se implanta un carril bus, cómo se hace y dónde se ubica es del Ministerio de Transportes. Y, en concreto, en el caso del carril bus de Móstoles, “está mal diseñado y esa responsabilidad es del señor Puente, aunque no quiera reconocerlo”.

“Las obras de soterramiento de la A-5 nos exigen a las administraciones que demos respuestas efectivas a los vecinos”, ha manifestado el alcalde. De paso, ha recordado al ministro que “los mostoleños necesitan urgentemente la gratuidad de la R-5, una medida que ya solicité por carta al ministro Puente en octubre del 2024 pero, para variar, ha dado la callada por respuesta”.

No obstante, el mal funcionamiento del carril bus, ha obligado a rectificar su trazado al Ministerio de Transportes. De hecho, los conductores han podido constatar hoy que se ha reducido en dos kilómetros.

Las obras de la A-5 y el plan de movilidad diseñado por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible en los municipios limítrofes han soliviantado a los conductores de Móstoles, Arroyomolinos y Alcorcón en su intento por llegar al centro de la capital por la autovía en obras. El origen del malestar tiene que ver con el carril bus que comienza pasado el kilómetro 18, en sentido entrada a Madrid, y se extiende hasta el kilómetro 14 aproximadamente en un primer tramo. En una segunda fase, el carril se inicia desde el kilómetro 11, coincidiendo con un área comercial de Alcorcón, hasta el kilómetro 9,6, a la altura de Cuatro Vientos.

Así, el nuevo carril no solo provoca intensos atascos a 10 kilómetros del punto donde se realizan las obras de soterramiento, sino que, además, permanece prácticamente vacío, pese a estar pensado para facilitar la movilidad de los usuarios del transporte público. Esta situación genera una creciente irritación entre los conductores que quedan atrapados en el embotellamiento.