Parece que construir y vivir en altura no solo es más eficiente y cómodo sino también más ecológico: menos consumo de energía, menos desplazamientos y más aprovechamiento de recursos. Llega la agricultura aérea.

Las granjas verticales pretenden fabricar alimentos, pueden producir vegetales e incluso aves, peces y animales en general sobre suelos de sustratos o agua mediante técnicas de hidroponía, luz y calor eléctricos con control de temperatura para que haya cosechas todo el año. La arquitectura se ha puesto manos a la obra y ya hay proyectos en todo el mundo. Pero es este tipo de agricultura la que el mundo necesita? Esa es la pregunta.