Toyota vuelve a acertar en la categoría de los SUV urbanos

Dentro del mercado general de automóviles que se venden en España, el llamado segmento B es el que consigue una mayor proporción de ventas. Y, como las preferencias del público van hacia las carrocerías todo camino, los SUV de estas dimensiones, en torno a los cuatro metros, son lo que tienen una mayor aceptación. Y para intentar comerse un buen trozo de esta tarta, Toyota ofrece la alternativa del Yaris Cross desde 21.500 euros.

Hay que tener en cuenta que la firma japonesa ya tiene una larga experiencia en este campo. Hay que recordar que el RAV4 fue uno de los coches más apreciados del momento. Todo un hito. Ahora el Yaris Cross se deberá enfrentar no solo a los líderes de esta categoría, que son el Seat Arona, el Peugeot 2008 y el VW T-Cross, sino a otros modelos de las principales marcas que están presentes con modelos muy interesantes como Renault Captur, Fiat 500X, Citroën C3 Aircross, Mazda CX3, DS3 Crossback, los Hyundai Bayon y Kona, Ford Puma, Kia Stonic o el nuevo Honda HR-V…

No hay que dejarse llevar por las ideas preconcebidas. Al decir Yaris, todos pensamos en un utilitario de dimensiones muy ajustadas. Y no es así en el caso de la versión Cross ya que sus formas son las de un todo camino de amplias dimensiones ya que mide 24cm. de largo más que el Yaris turismo y su apariencia externa se ve reforzada por elementos que destacan su personalidad, como pueden ser sus pasos de rueda muy cuadrados con protecciones de plástico negro o su techo. Todo para transmitir una imagen de robustez, pero manteniendo unas dimensiones para ser eficaz en el tráfico urbano, ya que mide 4,18 de largo y 1,56 de alto, pero manteniendo la distancia entre ejes de 2,56 metros, que asegura una muy buena habitabilidad interior con espacio para cinco pasajeros. Más espacio que en el Cari normal gracias a la mayor altura del techo. Y lógicamente, más espacio para los equipajes, ya que su maletero se aproxima a los cuatrocientos litros, eso sin recurrir a la posibilidad de abatir los respaldos de los asientos posteriores para lograr una gran superficie plana y muy amplia.

El conductor se encontrará con una instrumentación clara y de fácil acceso y, en posición central del salpicadero, una pantalla de hasta nueve pulgadas a través de la cual se puede acceder a todos los sistemas de infoentretenimiento, conexiones de teléfono por Apple Car Play. Entre los asientos, en la consola central, encontramos un cargador inalámbrico y se pueden conectar a través de una rueda un control de adherencia para superficies complicadas como nieve o barro.

En lo que respecta a la mecánica, hay que recordar siempre que Toyota es una referencia pionera en mecánicas híbridas autorrecargables. El Yaris Cross ofrece una potencia de 116 caballos gracias al trabajo de un motor de gasolina de tres cilindros y 1,5 litros de cilindrada, combinado con una caja de cambios automática de 6 velocidades y el complemento de dos motores eléctricos y una batería que regenera energía en las frenadas o incluso cuando levantamos el pie para una retención. Algo que permite circular en eléctrico la mayoría del tiempo que vayamos por ciudad y lograr consumos de poco más de cinco litros por carretera. Su comportamiento en zonas de curvas resulta ágil y agradable, si bien no le vendrían mal unos caballos adicionales o un cambio de reacciones más rápidas. Su plataforma TNGA-B le da un agarre muy destacado en todas las circunstancias.

Como era de esperar en un Toyota de última generación, el Yaris Cross viene equipado con un completo paquete de sistemas de ayuda a la conducción, como precolisión, avisador de peatones, control de crucero adaptativo hasta 180 km/h con reconocimiento de señales, sistema de mantenimiento de la trayectoria con asistencia a la dirección o airbag central de serie. Además de otros adicionales como alerta de tráfico cruzado posterior, detector de ángulo muerto, sistema de aparcamiento inteligente o parking con sensor de frenado automático.