Mercado

Mercedes GLC 2023: un SUV preparado para todo

En su segunda generación presenta motorizaciones diésel, gasolina y un híbrido enchufable con autonomía eléctrica de hasta 136 kilómetros en ciudad

Mercedes GLC 2023: un SUV preparado para todo
Mercedes GLC 2023: un SUV preparado para todoMercedes-Benz AG Communications & Marketing photo by Dieter Rebmann on behalf of Mercedes-Benz AGMercedes-Benz AG

Tiene la elegancia de todos los modelos de la marca de la estrella y la eficacia de los mejores todoterreno. Es la segunda generación del GLC, el Mercedes más vendido en el mundo y que presenta diferentes modificaciones tanto en su carrocería como en los acabados interiores y las motorizaciones. En este último apartado es destacable la versión hibrida enchufable que llegará en enero y en la que el fabricante anuncia una autonomía en modo eléctrico de más de ciento treinta kilómetros en ciudad. Una cifra nunca vista para un PHEV.

Mercedes GLC 2023: un SUV preparado para todo
Mercedes GLC 2023: un SUV preparado para todoMercedes-Benz AG Communications & Marketing photo by Dieter Rebmann on behalf of Mercedes-Benz AGMercedes-Benz AG

Sus características hacen de él un coche para todo uso. Sus formas elegantes le avalan como un coche de lujo, a lo que contribuyen, asimismo, la calidad de materiales y el diseño de su interior. Pero algunas de sus características técnicas hacen de el uno de los todoterreno más eficaces del mercado. Su sistema 4Matic, tecnología Mercedes de cuatro ruedas motrices, su eje trasero direccional con hasta 4,5 grados de giro, los controles electrónicos de tracción y de descenso, la pantalla central que nos indica todas las características para conducir fuera del asfalto, la amortiguación regulable o incluso el sistema denominado “capo transparente”, que por medio de cámaras el conductor puede ser los obstáculos que surgen ante nuestras ruedas delanteras y que nos los tapa la carrocería, hacen del GLC un arma casi imbatible. Tuvimos ocasión de probarlo en un duro circuito preparado expresamente para poner al límite sus características, con subidas y bajadas pronunciadas e incluso vadeos. Y los resultados fueron más que satisfactorios.

En su segunda generación, el GLC ha sufrido algunos cambios importantes. Las formas de la carrocería, que tiene un coeficiente aerodinámico de 0,29, transmiten a la vez una sensación de robustez y de elegancia. Es seis centímetros más largo que el anterior modelo y sus medidas totales son 4,76 metros de largo, por 1,89 de ancho y 1,64 de alto. Y lo que es muy importante, una distancia entre ejes de 2,88 metros, lo que repercute en el espacio para los pasajeros. Vemos cambios en la parte frontal, especialmente en los faros a la parrilla, y detalles en la zona trasera. En la vista lateral destaca, sobre todo, el diseño de las llantas que pueden ser de hasta 20 pulgadas de medida. El tamaño de su maletero es más que notable, con 600 litros de capacidad, ampliable hasta los 1.640 litros abatiendo los asientos. Esta capacidad se reduce un 30% en los híbridos enchufables por el emplazamiento de las baterías.

En el interior el diseño y el empleo de materiales de calidad es el que nos podemos esperar en un Mercedes, con unos asientos amplios y envolventes que sujetan muy bien el cuerpo en las curvas y en lo caminos fuera del asfalto. En la vista del habitáculo, además del techo panorámico, es destacable la pantalla que nos informa de todos los comportamientos para la conducción “off-road”, complementaria de la que tiene el conductor frente a sus ojos, tras el volante multifunción, que nos señala los datos del funcionamiento del motor. Como es de esperar en un Mercedes de alto nivel, este automóvil viene preparado con todos los sistemas más avanzados de ayuda a la conducción, como cambio de carril, identificación de señales de tráfico, cámara de 360 grados, asistentes de aparcamiento, detección de ciclistas y peatones, maniobra de evasión, maniobras con remolque…. Además de los propios de la condición todoterreno como, por ejemplo, el control de tracción donde el conductor puede fijar la velocidad a la que quiere descender y levantar el pie del acelerador. El coche se ocupa de todo. Otro detalle es que las ruedas traseras giran al sentido contrario que las delanteras a baja velocidad, lo que facilita las operaciones de aparcamiento.

Por lo que se refiere a la mecánica, en todos los casos son bloques de cuatro cilindros que gozan de una micro hibridación con batería de 48 voltios, tanto en los diésel como en las versiones de gasolina. El fabricante ofrece dos versiones diésel, 220D y 300D, en ambos casos con motor de 1.993cc. y con potencias de 220 y 292 caballos respectivamente. Las dos opciones de gasolina, denominadas 200 y 300, montan un bloque de 1.999cc. y dan 227 y 281 caballos respectivamente. Finalmente, la PHEV, que llega en enero, sube su potencia hasta los 340cv. En todos los casos las prestaciones son importantes, con velocidad punta que puede llegar a los 240 por hora y acelerar de cero a cien en 6,2 segundos.

El hibrido enchufable tiene una capacidad de recargar sus baterías en media hora en un cargador profesional y en menos de cuatro horas en un enchufe de casa. Lo destacable es que el fabricante declara una autonomía en modo eléctrico de algo más de 130 kilómetros en ciudad y una velocidad punta en este mismo sistema de hasta 140 por hora. Este nuevo GLC ya está disponible en los concesionarios de la marca para hacer las reservas. Los precios arrancan en 58.150 euros en la versión 220 para subir a 60.850 para el 220D y terminar en 75.925 euros de la versión híbrida enchufable que, previsiblemente, será la más solicitada por los compradores.