Deportivo
El eléctrico que cumple con el espíritu de Alpine
La versión más deportiva del Renault 5, el Alpine A290, ya está a la venta en España con dos niveles de potencia y sensaciones muy de carreras. Desde 38.700 euros sin contar ayudas
En una reciente entrevista concedida a La Razón, Paula Fabregat, diseñadora del nuevo Renault 5 eléctrico, afirmaba que en la era eléctrica había que hacer coches emocionales. Desde luego, el R5 es un automóvil pasional que ha acertado muchísimo con su enfoque y ha respetado al máximo la historia que arrastra un vehículo que marcó toda una época en los 70 y 80. Y con el Alpine A290 esas dosis de emoción aumentan considerablemente. Ahora, el fabricante da un paso más con este modelo y lanza al mercado su variante más agresiva y deportiva de la mano de Alpine con la denominación A290. Un coche que te “quitará cualquier pena” cada vez que te sientes al volante. Y que se olviden de criticar los pro de la gasolina porque las prestaciones del coche son increíbles.
Tuvimos la oportunidad de conducir el coche durante su presentación internacional celebrada en Mallorca. Como no podía ser de otra manera, la base es el R5, pero su longitud crece siete centímetros, 3,9 metros, y su anchura seis para irse a los 1,8 metros. La anchura del Alpine es patente en relación a su hermano de Renault. Está a la venta con dos niveles de potencia, 177 y 220 cv y comparten la misma batería de 52 kW que ofrece una autonomía que oscila entre los 360 y 380 kilómetros y puede cargar a una potencia máxima de 100 kWh. Eso sí, si nos ponemos de viaje y no pasamos de 135 km/h si vamos por autovía, la autonomía será de unos 200 km, dejando un margen de unos 30-40 kilómetros para tener un plan B por si el cargador en el que paramos presenta alguna anomalía.
El A290 es un pequeño coche de carreras que no resulta tan radical como cabía esperar. Es un eléctrico perfectamente apto para el día a día que en un momento dado puede sacar mucha fuerza y deportividad. Al volante, recortado por abajo, nos encontramos varios elementos que nos hablan de su carácter. En la versión más potente, si rodamos en modo Normal, el coche rinde 190 cv, pero si pulsamos un botón rojo, nos da una potencia extra, la restante, de 30 cv que nos sirve para adelantar, como el overboost que tienen algunas competiciones de monoplazas americanas. En cualquier caso, si rodamos en modo Sport, la potencia disponible será de 220 cv.
El Alpine no tiene una aceleración demasiado fulgurante, 6,4 segundos, pero una vez en marcha sus cualidades son extraordinarias. Sus frenos delanteros tienen discos de 320 mm y la suspensión dispone de un toque de competición y dureza que te hará sacar una sonrisa en cualquier curva o fuerte frenada. Para ello también cuenta con unos neumáticos Michelin PilotSport que la compañía francesa ha desarrollado específicamente para este modelo. Como decíamos, el A290 disfruta de cuatro modos de conducción y otros cuatro para los niveles de frenada regenerativa. Esta última dispone de una ruleta en el volante al estilo de los volantes de la F1. En este caso no tiene levas como pueda haber en el Renault Scenic, que en un momento dado son útiles para frenadas más agresivas.
En ciudad el coche es un eléctrico suave, tranquilo…y en carretera muestra bastante mejor su personalidad con recuperaciones que desconcertarán a quienes compartan con nosotros la carretera. Pero un circuito también puede ser su hábitat natural. Pudimos conducir el Alpine A290 eléctrico en el trazado de Llucmajor, una pista estrecha, divertida y con un tamaño perfecto para el coche. La experiencia fue muy buena y nos sirvió para darnos cuenta del pequeño gran deportivo que teníamos entre manos. La capacidad de tracción en curva lenta se le suponía y así fue, pero sorprendió su enorme agilidad, el buen comportamiento en curva, en frenada y, en definitiva, la confirmación de que, como buen Alpine, hace honor al nombre que representa.
Ligero
El A290 pesa solo 1.554 kilos, 29 más que su hermano el R5, un peso extra que los responsables achacan al mayor peso de las llantas y otros pequeños detalles. El precio del Alpine A290 en España oscila entre los 38.700 y 46.000 euros, a lo que hay que restar las ayudas del Plan Moves, que pueden alcanzar los 7.500 euros. Sin duda, Alpine ha sabido adaptar bien el R5 a su planteamiento deportivo y la diferencia de precio con la versión más alta del R5 no es descabellada.
Con el Alpine sentiremos la deportividad en todo momento. A pesar de ser un eléctrico, podemos sentir la competición cada día. Sin perder de vista que es un coche pequeño y urbano que además, como ocurre en todos los eléctricos del grupo, dispone de Android Automotive, con el navegador del coche y la gestión de la batería gobernados por Google Maps, que nos indicará con absoluta precisión el nivel de batería con el que llegaremos a nuestro destino o por etapas, según lo hayamos configurado. La velocidad de carga de la batería es óptima para su capacidad y en un cargador semirápido podremos cargar del 20 al 80% en algo menos de media hora. Alpine y Renault lo han vuelto a hacer.