Más garra para la familia eléctrica de Peugeot

La nueva línea de diseño Peugeot, estrenada en el 408 y 508, se va extendiendo a toda la gama de automóviles. Antes de que la nueva generación del SUV superventas –el 3008/5008- llegue a nuestras carreteras, ya se ha incorporado a la zona media -segmentos B y C- con la actualización del 208 y 308. Pero no sólo ha sido un “lavado de cara”, ya que ambos modelos estrenan importantes novedades tanto en el exterior como en el interior de sus carrocerías.

Estos “restylings” incluyen la moderna calandra delantera que se difumina en el paragolpes, una firma lumínica actualizada –con las “garras” del león en los costados- y el nuevo logo Peugeot, incrustado como un escudo nobiliario en la parte más visible. El 208 y el 308 incorporan nuevos paragolpes, faros y pilotos tanto delante como detrás (así como una nueva paleta de colores) que modernizan su aspecto.

En la familia 208 hay pluralidad de oferta mecánica, con motores tricilíndricos microhíbridos de gasolina PureTech de 100 y 136 CV y también la versión totalmente eléctrica, denominada E-208. Esta, sin ser una plataforma totalmente nueva, sí ha mejorado tanto la batería como el motor. La primera (con una nueva composición química), proporciona 51 kW netos de potencia y va acoplada al nuevo motor de 115 kW (156 CV) de la gama Stellantis, con una autonomía que alcanza los 400 Km (ciclo WLTP). También se mantiene a la venta el motor antiguo de 100 kW (136 CV) con batería de 43 kW/h.

Interiormente dispone de una evolución del conocido “i-cockpit”, con un cuadro digital de 10 pulgadas con animaciones 3D (en las dos versiones de mayor equipamiento), junto con una pantalla táctil central de hasta 10 pulgadas (en las versiones Allure y GT). Esta se complementa con un teclado inferior analógico, de rápido acceso a las principales funciones, ya conocido. Y con aditamentos como un cargador de móviles por inducción más rápido, nuevas cámaras exteriores de mayor definición, puertos USB...

Conducir el nuevo Peugeot E-208 con 156 CV es un placer, porque tiene el compromiso perfecto entre peso (1.455 Kg) y potencia. Con un centro de gravedad muy bajo, ofrece un comportamiento neutro, gran aceleración (sobre todo si ajustamos el modo de conducción en “Sport”) y excelente velocidad de paso por curva. En la frenada y recarga de la batería ayuda positivamente el sistema “Brake”, de un nivel no demasiado intrusivo. Su precio de venta oscila entre 35.000 y 40.000 euros, en función de la potencia y del equipamiento (4 niveles).

Su hermano mayor el E-308 se declina en dos carrocerías diferentes: el compacto de cinco puertas y el familiar o “Station Wagon”, con una trasera más capaz. Ambas incorporan también la nueva línea estética de Peugeot, aunque no las triples garras frontales en su firma lumínica, que lo diferencian de sus otros hermanos de gama. La versión E-308 es pionera, ya que se trata del primer familiar cien por cien eléctrico de segmento C.

Las dos carrocerías del 308 pueden ir propulsadas por una gama de motores amplísima, con bloques de gasolina, diésel, híbridos enchufables o cien por cien eléctricos. La novedad de este otoño es el E-308, equipado con la batería de nueva composición de 51 kWh y el motor síncrono de 115 kW (156 CV), para un peso total de 1.716 Kg (en el más largo “SW”). Peugeot ha homologado consumos de menos de 16 kW/h y una autonomía superior a los 400 Km.

El habitáculo sigue siendo generoso, con un maletero ampliable al abatir los respaldos traseros (mucho más grande en el “SW”), aún más confortable para los ocupantes con tapicería y paramentos de buen tacto, climatización y aislamiento acústico. Aunque la mayor parte de las novedades afectan al puesto de conducción: “i-cockpit” mejorado, con cuadro de instrumentos digital 3D y pantalla central aérea de 10 pulgadas, que parece aún más grande al contar –debajo- con la batería de “i-toggles”, los pulsadores digitales personalizables.

Ligeramente más pesado y grande que el E-208, el E-308 saca un poco menos de sustancia al mismo motor, aunque dispone de tres modos de conducción (Eco, Normal y Sport) que permiten adecuar el estilo de marcha y el consumo. Este no difiere en la realidad del homologado WLTP, con cifras cercanas a los 13 kW/h en uso mixto por carretera y ciudad, incluso en modo Sport. Sin duda, el intensivo uso del “Brake” de recarga en bajadas y retenciones colabora a recuperar la capacidad de batería.

Los nuevos Peugeot E-308 ya están a la venta, con una renovada gama de colores muy vistosos, cuatro niveles de acabado (Active, Style, Allure y GT) con precios que van desde los 42.950 (berlina) a los 45.700 euros (Station Wagon). Las versiones de combustión comienzan su lista de precios en 28.100 euros, aunque los híbridos más lujosos se equiparan en precio final a los cien por cien eléctricos.