El City de Pep nos muestra el camino

Esta semana hemos visto el peligro de gastar sin límite ni control. De apostar por fichar estrellas sin pensar en las consecuencias. De volverse loco por ganar y construir un equipo sin tener en cuenta las reglas del juego. No todo vale. Hay que cumplir con el Fair Play Financiero. Mientras UEFA deja al City de Guardiola dos años fuera de Europa, Madrid o Barça siguen perteneciendo a sus socios. No llegará un multimillonario caprichoso gastando sin medida para meterles en un lío.

La burbuja El Madrid ni se planteó pagar 180 millones por Pogba. El Barça no tenía 200 millones para recuperar a Neymar. Nuestra Liga no puede estar al margen de la burbuja en la que los clubes-Estado han metido al fútbol. Empezaron el PSG pagando 222 millones por Neymar y el City, que ha gastado mil millones para confeccionar su plantilla actual.

El agujero del Barça El Barça tuvo que ajustar mucho sus cuentas para soltar los 120 millones por Griezmann y ha descuidado la cantera. Qué bien le vendrían a Setién los Aleñá, Carles Pérez o Abel Ruiz. Al final, ha terminado mendigando puerta por puerta para intentar fichar un ‘9’ pagando no más de 5 millones. O buscando fórmulas para salvar la multa por incumplir el límite salarial.

Cracks del futuro En cambio, el Madrid siempre lo tuvo claro. Apostó por captar talento joven, por fichar a los cracks del futuro. ¿Será Vinicius una estrella? Está por ver, aunque tiene toda la pinta. ¿Lo serán Rodrygo, Odegaard, Kubo o Reinier? No hay otra alternativa que fichar diamantes en bruto y esperar que brillen con luz propia.

Adelantarse Hay que arriesgar. No puedes esperar a que Vinicius triunfe en el Arsenal o el Mónaco y acabar pagando una barbaridad. Hay que adelantarse. Las condiciones del mercado cambiaron y en el club blanco lo vieron antes que nadie, planificando su política, moderando el gasto. Si no puedes fichar estrellas, hay que fabricarlas.

Sin locuras, pero… Si se confirma el ‘Brexit’ de la UEFA al City, aparecerán oportunidades con muchos jugadores de talla mundial que no querrán disputar solo las competiciones inglesas. Pero el Madrid no va a hacer locuras. Solo tiraría la casa por la ventana en casos excepcionales. Los 350 millones por Mbappé no los va a pagar… de momento.