Opinión

Dejar en evidencia

Hoy el Congreso va a debatir la propuesta del PP para castigar con prisión los referendos ilegales, como prometió Sánchez en su campaña electoral. Se trata de una reforma del Código Penal que no tendrá los apoyos necesarios pero que pretende –dicen los populares– dejar en evidencia a Pedro Sánchez, quien cuando estaba en la carrera presidencial decía una cosa y, ahora que necesita los votos de los separatistas, otra.

Castigar con la cárcel los referendos ilegales es bastante razonable, a la vista de lo que hemos padecido. Tampoco está mal la inhabilitación, que ya vemos que es lo único que les queda a algunos tras su fugaz salida de prisión. Fueron unas penas –la cárcel y la inhabilitación– que puso en marcha José María Aznar tras el llamado «Plan Ibarretxe». Pero le faltó tiempo a José Luis Rodríguez Zapatero tras llegar a La Moncloa, para cargárselas.

El PP propone penas de prisión de tres a cinco años, e inhabilitación por el mismo tiempo a aquellos funcionarios que convoque las consultas, así como prisión de seis meses a un año a los que las faciliten, promuevan o aseguren su realización una vez acordada la ilegalidad del proceso. No parece ningún dislate, pero la propuesta no va a prosperar.

Tampoco creo que dejar en evidencia al Gobierno sirva de mucho. Ya él mismo ejerce esa tarea casi a diario con ministros como José Luis Ábalos o con sus socios de Gobierno de Unidas Podemos. Quizá –dicen algunos– sería mejor apoyarle en ciertas leyes y reformas. Pero no se dan cuentan de que este socialismo no quiere de ninguna manera ser ayudado por el centro derecha. Le va en ello la vida si quiere sacar adelante los Presupuestos. Y si no es al partido, sí al menos a Pedro Sánchez.