El Gobierno de Pedro Sánchez

¡Franco: presente para el Gobierno!

Para Sánchez, las noticias públicas y publicadas respecto a su pacto con Bildu, son «fake news inventadas por la derecha para desacreditar a su progresista Gobierno». Para salir al paso, ha escrito una larga misiva a sus militantes –con paternalista tuteo incluido– utilizando la siguiente argumentación, entre otras: «Habrás comprobado… que la atención se desvía hacia asuntos del pasado… que nada tienen que ver con los presupuestos». Si tenemos en cuenta que fue el vicepresidente Iglesias quien escenificó los pactos con Bildu, felicitándose además de estar junto con ERC «en la dirección del Estado», habrá que concluir que Iglesias es un «fake». Pero, aludir a «asuntos del pasado» usados por la oposición para desviar la atención, nos lleva también a inferir que la vicepresidenta primera Calvo es otro «fake», por cuanto dirige un ministerio dedicado a la Memoria Democrática, que parece se refiere más al pasado que a otra cosa… Salvo que, para la bicefalia gobernante, Franco no sea pretérito, sino presente, como parece. Que Pedro Sánchez, que es la más viva encarnación gobernante de la mentira, se atreva a teorizar, descalificar, censurar y controlar qué son noticias falsas, indica hasta dónde hemos llegado con él. Es lo que hay: un «Gobierno fake». Mientras padecemos una oleada inmigratoria en Canarias, solo falta ya –emulando los vivas de rigor del pasado–, que las Leyes Calvo y Celaá, nos lleven a comenzar las clases en las escuelas, con los niños en el patio debidamente formados al grito de «¡Francisco Franco: presente para el Gobierno!».