El Gobierno de Pedro Sánchez

Derechos del Gobierno

La agenda política de todo Gobierno define sus prioridades políticas, que solo suelen verse alteradas en caso de fuerza mayor sobrevenida, como catástrofes y eventos extraordinarios, que obligan a concentrar recursos y esfuerzos –#unidosSalimosMasFuertes– para contener y reparar el daño causado. La pandemia es un claro ejemplo, pero parece que para este Gobierno solo lo es a efectos de suspender o limitar derechos y libertades de los ciudadanos, con el paraguas «legal» del estado de alarma. Mientras, su agenda política permanece incólume en su propósito de transformar la sociedad desde una óptica netamente rupturista con respecto a la cosmovisión basada en nuestras históricas raíces cristianas. Sin diálogo político ni social –de unidad, nada de nada– y con total oscurantismo, se tramitan proyectos de ley con la sociedad confinada y amordazada, y su derecho fundamental de reunión y manifestación netamente limitado «por la pandemia». Un claro ejemplo, pero no el único, es la nueva ley de educación, que viola, entre otros, el derecho de los padres respecto a la educación de sus hijos. Con el miedo al contagio del virus inoculado socialmente, también se tramita nada menos que la regulación de la eutanasia y el suicidio asistido, atreviéndose a afirmar que es «un nuevo derecho a morir dignamente» apoyado por el 90% de la población. Esperamos a ver cuántos de nuestros mayores están queriendo contagiarse para conseguir tal deseo. Saldremos también con más opciones vitales, con más libertad: en el DNI, podremos elegir un tercer género: derecho regalo del ministerio de «Igual’da».