Entre Tremp y Trump

La atención informativa en estos meses está focalizada entre dos polos, tanto geográficos como temáticos: por una parte, el coronavirus y su incidencia; y por otra, las elecciones norteamericanas. El icono de la oleada primaveral del virus fue el de aquellas interminables homilías de Sánchez y la continuada exposición de Don Simón, dejándose ver durante la misma incluso en globo aerostático o surfeando. Pero el recuerdo debe ser no tanto las palabras y las imágenes como los resultados, que ahora en la ya preanunciada oleada otoñal, son una vez más los ancianos fallecidos sin atención ninguna en las residencias, como ya sucediera en primavera.

En esta ocasión, ese icono bien podría ser la localidad ilerdense de Tremp, donde el fallecimiento en condiciones lamentables de 54 mayores en una residencia, ha motivado la apertura de diligencias por la Fiscalía con el cruce de acusaciones entre la Fundación titular del centro y la Generalitat, a la que la primera acusa de lo sucedido, alegando que todo se precipitó tras su intervención en la gestión hace unas semanas. De Puigdemont no se tienen noticias al respecto, pero sí de Trump, que atrae el otro foco informativo, con la odisea del escrutinio de las recientes elecciones. Parece que al final Biden y Harris serán los proclamados vencedores, aunque no pocos mantienen fundadas sospechas en torno a lo que pasó realmente con los votos durante el escrutinio, que –como el Guadiana– aparecían y desaparecían por horas. La noticia va de Tremp a Trump, o viceversa.