Sánchez, Jamaica y el semáforo

Hans Dietrich Gencher (1927-2016) fue ministro de Asuntos Exteriores de la República Federal Alemana 18 años seguidos, entre 1974 y 1992. Líder del partido liberal, FDP, primero apoyó a los socialdemócratas de Helmut Schmit, hasta 1982, y luego a los conservadores de Helmut Köhl. Su presencia en los Gobiernos era tan segura que hasta había un chiste que decía que la Constitución alemana establecía que Gencher sería el ministro de Asuntos Exteriores. Los liberales alemanes, que pasaron tiempos difíciles con el nuevo siglo, vuelven a ser decisivos en Alemania, liderados ahora por Christian Lindner, que no aspira al puesto de su histórico predecesor, sino al ahora bastante más importante de ministro de Finanzas. Los liberales han quedado cuartos en los comicios del domingo, pero tienen la llave para la formación de Gobierno que todo apunta que será tripartito y encabezado por los socialdemócratas (SPD) de Olaf Scholz. También necesitarán a los verdes de Annalena Baerbock que plantearán su exigencias, pero que apenas tienen otras opciones.

El tripartito SPD-liberales-verdes, recibe el nombre de «semáforo», por la combinación de sus colores. El otro posible tripartito, liderado por los conservadores, con liberales y verdes de compañeros, es «Jamaica», porque sus tres colores son los mismos que los de la bandera del país caribeño. Al final, haya gobierno «semáforo» o «Jamaica», afectará a la política española. Sánchez, por supuesto, es partidario del «semáforo», aunque tampoco le facilitará demasiado las cosas en la Unión Europea. El liberal Lindner, será clave y tendrá mucho que decir en el futuro gobierno alemán, y no es partidario, en temas europeos, de grandes alegrías monetarias ni de ser muy comprensivo con la deuda. «Jamaica», con los conservadores al frente y Lindner, por muchas concesiones que hicieran a los verdes, sería peor para Sánchez, que soñaba con un triunfo rotundo de los socialdemócratas pero que se contenta con el «semáforo» alemán, que no será jauja. Lindner, liberal, es decisivo y podría perpetuarse como su predecesor Gencher.