Opinión

«Mujeres, café y clima en Etiopía»

El BOE de anteayer, viernes 3 de diciembre, publicó una Resolución del director de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, que expresa magistralmente a dónde hemos llegado de la mano de estos progres de salón, burgueses marxistas y seguidores doctrinarios de la Escuela de Frankfurt que nos desgobiernan, en Bruselas y aquí. Si no lo hubiera leído con mis propios ojos, admito que habría pensado que se trataba del título de una película o de una obra de teatro del género de comedia de enredo. Pero, por el contrario, es una cosa muy seria y nada prosaica: Se trata de ayudar a las mujeres etíopes para el cultivo del café.

Dice así la citada norma administrativa: «Convenio de contribución con la Unión Europea para la ejecución de la acción “Mujeres, café y clima: empoderamiento femenino para la resiliencia socioecológica de la cadena de valor del café frente al cambio climático en Etiopia”». Como ven no falta ningún ingrediente del lenguaje propio de la denominada «Nueva Izquierda», a caballo del marxismo cultural de Gramsci y de esa Escuela de aburguesados marxistas que salieron al rescate del marxismo leninismo tras el triunfo de la revolución bolchevique en 1923. Era preciso alejarse de la lucha de clases y de la dictadura del proletariado como medio revolucionario para alcanzar el poder a la vista de los desmanes de Lenin y Stalin en la recién nacida «Union de Repúblicas Socialistas Soviéticas», la URSS. Ahora lo que se estila no es la dictadura proletaria, sino la de la corrección política y sus dogmas, la ideología de género, el lenguaje inclusivo, el cambio climático, la ecología, la economía sostenible, la resiliencia, el empoderamiento, etc. Toda esa sucesión de cursis tópicos están presentes en este Convenio cuyo título es todo una autentica obra maestra de los burócratas de Bruselas en conjunción con los nuestros autóctonos. Lo cierto es que una «acción» intitulada «Mujeres, café y clima en Etiopía» más se aproxima al título de una película de Berlanga con los hermanos Ozores de protagonistas junto a Gracita Morales –aunque su físico no sea el de una mujer etíope, lo supliría con su arte–, o a una pieza más corta de nuestros geniales humoristas Tip y Coll. También hay una comedia divertidísima de título «Si hoy es martes, esto es Bélgica» que serviría igualmente para la ocasión.

No tengo duda alguna respecto a la importancia e interés de las mujeres etíopes por la «resiliencia socioecológica de la cadena del valor del café para hacer frente al cambio climático» en su país. Por ello está muy justificada esa acción a fin de «empoderarlas» y cultivar café para cambiar el clima. Dicho queda.