Julián Redondo

Cunde el ejemplo

Cunde el ejemplo
Cunde el ejemplolarazon

Lo que el Cholo ha construido que no lo destruya el fútbol. Simeone ha rescatado al Atlético de la resignación y lo ha convertido en un equipo ganador, e incómodo. Ha dejado de ser el amiguete que garantizaba seis puntos al Madrid y al Barça y encajaba goles en el vestuario. «Queremos un rival digno», escribieron unos cachondos en el Bernabéu, que ya no se ríen. Sin contemplaciones ni complejos, el Atleti ha espabilado una Liga a los magnates y da más disgustos que satisfacciones a quienes le miraban como a un comparsa. Y menos mal que saltó Ramos en el minuto 93. El Atleti ha crecido y le ha cogido el gustillo a los títulos. Ya no hace ninguna gracia. Ha encontrado una fórmula y un sistema para pelear y batirse el cobre en campos tan dispares como el Bernabéu o Ipurua; las faltas que antes cometía desesperado y a destiempo, hoy son de manual y duelen más en el orgullo que en los huesos de quien las recibe. Se ha extendido en determinados sectores que es un equipo sucio, lo más parecido a un destripaterrones. Desde luego, no reparte caramelos, la cuestión es que molesta y que el Valencia y el Sevilla se han apuntado a clases particulares y siguen su estela. Con lo que Simeone llama concentración e intensidad, y otros sólo patadas, se ha descubierto que al Madrid y al Barcelona les cuesta repartirse los trofeos. En pocas palabras lo ha definido Torres en el «As»: «Ahora salimos a ganar, no a ver qué pasa». Lo cual no garantiza la victoria. Haría bien en no confiarse por muchas bajas que tenga el Madrid.