Desnudos

Irina Shayk, que es una muchacha que se habló durante un rato con Cristiano Ronaldo (y por lo visto hubo poco más que conversación e intercambio de cremas para pieles mixtas durante ese rato), ha decidido desnudarse contra el cambio climático. Hala. Hay millones de tíos dando gracias al deshielo de los polos. No le quitemos méritos a Irina, que no es fácil tanta valentía y tanto compromiso. En cuanto se ponga en pelotas la chiquilla es evidente que acaba con los gases efecto invernadero en un periquete. Hay que desnudarse más, que hace mucho bien al mundo. Un caso similar, de beneficios incalculables, es el despelote de Carmen López, la concejala de Ciudadanos de Castilleja de la Cuesta. Carmen se enfrenta a un expediente de expulsión por pedir billetes de avión gratis para poder venir desde Estados Unidos a los plenos. Hay que ver cómo son en Ciudadanos, jopetas. Mi Carmen ha posado en bolas para «Interviú» porque así puede, dice, limpiar su imagen y, de paso, luchar contra la corrupción. No es una «tontunez», ha dicho mi concejala de mi alma, que además cree que si se la critica es que se es un machista de tomo y lomo. «Si no llego a hacer un desnudo no tengo voz. Y con cuarenta y tres años, no cuando tenía veinte y un cuerpo muy envidiable. Ahora estoy razonablemente bien pero no es el mejor de mis momentos». No sé si les ha quedado claro que mi Carmen cree que está mu güena. Contra la corrupción puede que esté, pero sobre todo lo que se nota ella es que está mu prieta. Así, sí, señores míos. Así se puede luchar por la paz en el mundo, el cero coma siete, por la vuelta de los dinosaurios y hasta por el éxito del huevo duro. Tanto tiempo luchando porque se nos tome en serio, nenas, y nos hemos rodeado de tías en culos.