Julián García Candau

Entró en calor

No llegó el general invierno a San Petersburgo. Sólo mandó una avanzadilla. El césped medio helado no facilitó el juego para delicadezas. Se prestó a lo que recomendó el entrenador atlético. Diego Simeone pidió a sus jugadores que contra el frío había que correr porque es la mejor manera de entrar en calor. Así lo hicieron. No cejaron en ningún momento y, aunque no poseyeron el balón más que el Zenit, sí supieron crear problemas al portero ruso en los contragolpes. Uno de ellos permitió que Adrián saliera rápidamente hacia la portería local y marcara el tanto que estuvo a punto de asegurar el triunfo.

No ganó el Atlético porque Courtois, el guardameta más alto de la Liga, fue incapaz de evitar que un balón que caía del cielo entrara en su portería. Al guardameta rojiblanco, de vez en cuando, le suele suceder que le baten de manera inesperada. La pelota le llegó por el rebote en la cabeza del belga Alderweireld, pero le sobró tiempo para interceptarlo. Hay socios atléticos que le suelen echar en cara que es al único guardameta al que Cristiano Ronaldo le marca en los libres directos. Ayer volvió a disgustar a su parroquia.

El Atlético no sólo estaba clasificado para los octavos de final sino que, incluso perdiendo, mantenía su liderato. La victoria se necesitaba para aliviar la contabilidad rojiblanca. Ganar en Liga de Campeones es sumar euros. El empate también, pero luchó por el triunfo. Al Atlético le bastó defenderse, principalmente de Hulk, el único que intentó batir a Courtois. Sólo pasó algunos apuros hacia el final del encuentro.

Posdata. Jugó pocos minutos Óliver, pero se hizo notar. Da alegría.