Mesa redonda

La pandemia impulsa la transformación digital de la salud

La crisis del coronavirus propicia el salto hacia un cambio de modelo sanitario más tecnológico e innovador

Carlos Sisternas, director Fenin Cataluña, Carina Escobar, presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes, Javier Urzay, subdirector General de Farmaindustria, Marta Villanueva, directora General de la Fundación IDIS, Carolina Pola, esponsable de Estrategia e Innovación de Kaudal y Marisa Serrano, chief research officer en Savana
Carlos Sisternas, director Fenin Cataluña, Carina Escobar, presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes, Javier Urzay, subdirector General de Farmaindustria, Marta Villanueva, directora General de la Fundación IDIS, Carolina Pola, esponsable de Estrategia e Innovación de Kaudal y Marisa Serrano, chief research officer en SavanaCristina BejaranoLa Razón

Pocas cosas buenas ha dejado la pandemia a su paso, pero si tuviéramos que señalar al menos una, esa sería un cambio, aún incipiente, hacia un modelo sanitario más digitalizado y tecnológico. Y es que si para algo ha servido la crisis del coronavirus es para preparar al sector para dar un paso adelante en este sentido. Así lo creen los expertos reunidos por A TU SALUD en la mesa de análisis y debate «El reto urgente de la transformación digital en salud», que fue retransmitida en directo vía «streaming» a través de la web del periódico, www.larazon.es.

La era de la digitalización ha alcanzado un estado de madurez en cuanto a tecnologías, medios de los profesionales sanitarios y cultura de la sociedad en general que requiere de manera prioritaria implementar herramientas y procesos innovadores para alcanzar los objetivos de esa transición y alcanzar la digitalización del Sistema Nacional de Salud.

En este sentido, la colaboración público-privada y la aportación de pequeñas y grandes empresas del sector salud será, sin duda, el motor de la innovación que defina soluciones para abordar eficazmente las prioridades de un sector fundamental para la sociedad como es el cuidado y la salud, y para lograrlo hace falta inversión y financiación.

«La clave para conseguirlo pasa por la colaboración entre todos los actores del sistema sanitario, la formación bidireccional y una inversión potente y continuada en el tiempo en I+D+i», confirmó Carolina Pola, responsable de Estrategia e Innovación de Kaudal, quien también señaló la importancia de «que poner el foco en la Pymes capaces de generar esa innovación».

La importancia de la inversión

Para arrancar y desarrollar proyectos innovadores hace falta financiación. Una forma de conseguirla es mediante el Mecenazgo Tecnológico, una vía de financiación basada en los incentivos fiscales aplicables a la investigación, el desarrollo y la innovación que atrae nueva inversión privada al ecosistema I+D+i. Y a eso precisamente es en lo que Kaudal está especializado: a poner en contacto a compañías I+D+i que tienen proyectos innovadores con empresas que cuentan con los recursos y quieren invertir en ello y acompañan a ambas partes en el proceso. «Nuestros Mecenas apuestan por la inversión I+D+i para contribuir al ecosistema investigador e innovador. Son compañías concienciadas que buscan invertir en actividades con una marcada responsabilidad social corporativa mientras obtienen una rentabilidad derivada de los beneficios fiscales –explica Carolina Pola–. Entre 2017 y 2020, hemos movilizado un volumen de inversión de más de 200 millones de euros, ayudando a impulsar más de 155 proyectos, 55 de ellos en salud que ascendían a más de 52 millones de euros».

Para Javier Urzay, subdirector General de Farmaindustria, la «transformación ocurre realmente cuando el dato revoluciona la forma de hacer la práctica clínica», y señala tres pilares: la Medicina de precisión, el dato de la vida real, y la medición de los resultados en salud.

A su entender, continúa, «hay un primer enfoque sobre la digitalización de los procesos sanitarios, como pueden ser las consultas digitales, el seguimiento remoto que hubo durante la pandemia o el sistema digital de verificación de medicamentos, pero en el futuro no lejano puede que se dé la supresión de los prospectos de los medicamentos y se cambien por un código QR y que funcionaría como los que hemos empezado a usar durante la pandemia para ver las cartas de los restaurantes».

Pero no son los únicos ejemplos. También a consecuencia de la crisis sanitaria la videoconsulta «ha crecido más de un 300%, demostrando que no solo no se desatiende al paciente, sino que sirve para liberar tiempo al médico para estar con ellos», apuntó por su parte Carlos Sisternas, director de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) Cataluña. Por eso, continúa, la digitalización «no es un fin, sino un medio para alcanzar resultados y la pandemia ha sido una oportunidad de oro para demostrarlo».

No obstante, aún queda un largo recorrido por delante al respecto, y como prueba de ello, se refirió al estudio llevado a cabo por Fenin sobre «Índice de madurez digital en salud», en el que se analizaban cuatro áreas básicas, y en el que la Sanidad española obtenía 31 puntos sobre 100, «lo que demuestra que queda mucho trabajo por hacer, «especialmente en cuanto a la interoperabilidad, donde el resultado fue de tan solo 17 puntos».

También para Marta Villanueva, directora General de Fundación IDIS, la actual situación es propicia para dar el salto: «Estamos viviendo la cuarta revolución industrial, no estamos hablando de futuro, sino de presente. Es imperativo, y estamos en el momento prefecto porque con la pandemia ahora tenemos la mente muy abierta y hay que aprovechar la oportunidad. Estamos abiertos para el cambio».

Así, en su opinión, para llevar a cabo este «cambio disruptivo, tenemos que cambiar la forma de entender el modelo, y esto pasa por la formación y por la innovación tecnológica». Por ello apuesta por romper barreras entre Sanidad pública y privada, especialmente en temas tan sensibles para el pacientes como la historia clínica. Para ello, explicó, «vamos a promover una plataforma de trazabilidad de esta historia clínica privada y a hacer una conexión entre Sanidad pública y la privada».

El futuro es ahora

También la presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP), Carina Escobar, participó en la mesa debate para aportar el punto de vista de los pacientes. Desde esta perspectiva entiende que «la salud digital no es un fin, es un medio. Necesitamos digitalizar los datos de los pacientes. Es vital y su importancia la hemos visto en la pandemia. Los pacientes crónicos en este tiempo hemos sido invisibles al sistema. Por eso también hay que crear espacios de participación efectiva, para poder compartir experiencias y dar nuestro punto de vista», aseguró.

Marisa Serrano, chief research officer en Savana, una compañía médica internacional que ha desarrollado una metodología científica que aplica la inteligencia artificial (IA), puso de manifiesto las muchas aplicaciones que ya hay en este sentido con la IA. «La FDA ha aprobado ya más de 40 aplicaciones de inteligencia artificial y en Reino Unido ya se emplean sistemas predictivos que la utilizan para hacer el ‘screening’ en la solicitud de citas».

Para Serrano, el mayor problema en España es que «la información está muy fragmentada en este sector, empezando por el hecho de que cada comunidad autónoma es diferente. Un ejemplo claro de esto ha sido, en la pandemia, la gestión de los datos de los contagiados, ha sido imposible». En cualquier caso, puntualiza, que los sanitarios tienen que entender que se trata de una herramienta que ha venido a ayudarles y no a sustituirles. Eso requiere de un cambio cultural. Y ahora estamos en un momento muy dulce para ello».