Hallazgo

Abren nuevas vías para el estudio del cáncer contagioso con animales marinos

El trabajo dirigido desde el CiMUS de la Universidad de Santiago de Compostela permitirá saber más sobre la metástasis en humanos

Imagen de la formación de la metástasis
Imagen de la formación de la metástasislarazon

El cáncer es un reto para la Ciencia y todavía queda mucho por avanzar. Ahora, investigadores españoles han dado un importante paso adelante al desvelar nuevos datos sobre la todavía poco conocida naturaleza contagiosa del cáncer y han logrado aportar nuevas pistas para el estudio de la metástasis a través de un artículo publicado en la revista científica eLife.

Ambos hallazgos han sido impulsados por el grupo Genomas y Enfermedad del CiMUS de la Universidad de Santiago de Compostela (USC), que lidera Jose Tubío, y amplía el conocimiento en la caracterización genética del cáncer partiendo de modelos animales marinos. El artículo recoge los primeros resultados del proyecto europeo Scuba Cancers en el que participan, además del grupo gallego, equipos de Portugal, Francia, Irlanda y Croacia, y está financiado por el Consejo Europeo de Investigación (ERC) con 1,5 millones de euros.

Cáncer, una enfermedad contagiosa

Los tumores contagiosos se descubrieron recientemente gracias a los avances del campo de la genética que permiten determinar en qué individuo se originó una célula tumoral. Actualmente sólo se conocen cánceres contagiosos en perros, demonios de Tasmania y varias especies de mejillones, almejas y berberechos. Los investigadores del proyecto Scuba Cancers acaban de publicar en la revista multidisciplinar eLife los primeros hallazgos de un nuevo caso de cáncer contagioso que afecta a una especie de almeja. Para ello, recolectaron más de 500 almejas de las costas de España, Portugal, Francia, Irlanda y Croacia y encontraron un tipo de cáncer similar a la leucemia llamado neoplasia hémica. Las tecnologías de secuenciación de ADN han permitido descubrir que «las células cancerígenas de la especie original pueden saltar entre especies comportándose de manera infecciosa», según apunta la investigadora del CiMUS, Alicia L. Bruzos.

Además, el estudio del ADN, tanto nuclear como mitocondrial, reveló que este cáncer se originó en una almeja donante diferente que habita las mismas regiones que las primeras almejas receptoras. El contagio de cáncer entre especies cercanas alerta, por tanto, del peligro que suponen estos cánceres contagiosos.

Origen, identificación y caracterización genética

«Nuestros hallazgos confirman que los cánceres transmisibles marinos pueden saltar entre especies y señalan la necesidad de su identificación y caracterización genética para su monitorización y prevención porque podría suponer un peligro para el ecosistema marino y una seria amenaza ecológica», sostiene la investigadora del CiMUS. «Un estudio previo sobre el cáncer contagioso de mejillones que se encuentra en las costas europea y sudamericana propuso como potencial vía de contagio el viaje de mejillones adheridos a los cascos de barcos que realizan rutas comerciales entre Europa y Sudamérica», según Alicia L. Bruzos. Esto sugiere profundizar en el conocimiento de la ruta completa de los contagios de cáncer, y las vías de transporte, para conocer las causas reales de la transmisión.

El grupo Genomas y Enfermedad, liderado por Jose Tubío, forma parte del proyecto Scuba Cancers
El grupo Genomas y Enfermedad, liderado por Jose Tubío, forma parte del proyecto Scuba CancersArchivo

El cáncer contagioso sobrevive a la muerte de la almeja en la que se originó porque infecta a nuevas almejas. De hecho, el cáncer contagioso que padecen los perros se ha estimado que tiene unos 8.500 años. «Futuros estudios nos permitirán arrojar luz sobre la edad del cáncer contagioso de las almejas donantes, pero como mínimo se sabe que tienen unos nueve años de antigüedad, ya que las muestras analizadas en este estudio fueron recolectadas entre 2011 y 2020», sostiene el investigador Daniel García-Souto. Por su parte, Jose Tubío, profesor de la Universidade de Santiago de Compostela, concluye que «el estudio genético de estos cánceres contagiosos es un nuevo punto de vista para intentar entender la metástasis, es decir, la propagación del cáncer a otros órganos del cuerpo. Con este nuevo caso de cáncer contagioso ahora contamos con más modelos para estudiar las causas genéticas de la transmisibilidad del cáncer».