Salud
La alergia a los alimentos se dispara entre los españoles
Cada vez se diagnostican más y en muchos casos no existe un tratamiento eficaz, aunque la inmunoterapia se presenta como la gran esperanza
Comemos todos los días y varias veces, muchas de ellas casi de forma inconsciente, sin prestarle demasiada atención. Y, sin embargo, puede resultar muy peligroso para algunas personas. De hecho, las alergias alimentarias registran datos ascendentes en Europa. Los estudios epidemiológicos llevados a cabo por la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), sitúan este tipo de sensibilización como la quinta causa de consulta en los Servicios de Alergología en adultos y la tercera en niños. Determinar cuáles son los alimentos más propensos a desencadenar una alergia se vuelve difícil al intervenir factores como la edad y el área geográfica. Así se puso de manifiesto en el XXXIV Congreso Nacional de la SEAIC, donde expertos alergólogos coincidieron que mejorar el diagnóstico, manejo y tratamiento de las alergias alimentarias debe ser el camino a seguir.
La sesión “Atención de excelencia en los pacientes con alergia a los alimentos” se ha centrado en el abordaje de los casos graves de este tipo de alergia, cómo reconocerla, y cuál es la situación actual y el futuro inmediato en la inducción a la tolerancia oral con alimentos. Además, se ha presentado el proyecto de reconocimiento de las Unidades de Alergia a Alimentos de Difícil Manejo, entre otros proyectos de investigación nacionales e internacionales.
“La alergia en alimentos se produce mayormente en los niños, concretamente durante el primer año de vida. Los estudios sitúan en torno a un 40% los menores que no consiguen superar sus alergias y lo siguen siendo durante su vida adulta”, señalan el Comité de Alergia a los Alimentos y el Comité de Alergia Infantil de la SEAIC. Esta prevalencia de la alergia alimentaria en niños, confirma que la edad es un factor determinante. De igual forma afecta el área geográfica. Es cierto que existen alérgenos comunes que desencadenan una reacción alérgica. Según los registros europeos, la leche de vaca y el huevo de gallina son los más frecuentes en los primeros dos años de vida. Posteriormente, los más comunes son los frutos secos y el cacahuete. “La diferencia geográfica se observa cuando, por ejemplo, en los países del área mediterránea observamos una tendencia a desarrollar alergia al melocotón, así como a la lenteja o la nuez”, explican desde los Comités. Concretamente en España el melocotón es uno de los tres principales alimentos que causan alergia junto con el melón, la gamba y el pescado. A pesar de la dificultad que supone poder precisar información sobre si la incidencia de alergia a algunos grupos de alimentos está aumentando, debido a la falta de datos, en España si se percibe un aumento de alergia al melocotón, los frutos secos y el cacahuete en cuanto a frecuencia.
Factor genético
En general, las enfermedades alérgicas tienen una tendencia genética, es decir, son más proclives a presentar este tipo de patologías aquellas personas con padres alérgicos. Si bien es cierto que las alergias en sí no se heredan, la predisposición a desarrollarla sí puede pasar de padres a hijos. “Que uno de los dos progenitores tenga algún tipo de alergia no significa obligatoriamente que los hijos vayan a heredar esa predisposición, aunque la probabilidad aumenta. Y esto ocurre de igual manera con la alergia a los alimentos”, matizan los expertos. Por otro lado, la reactividad cruzada es bastante común entre los pacientes alérgicos. Normalmente, las personas que sufren una reacción alérgica a una sustancia, también desarrollan sensibilidad a otra sustancia debido a sus características similares. “Quienes sufren reacción a un polen en concreto son vulnerables también a sus frutas o les pasa con un grupo completo de alimentos”, detallan el Comité de Alergia a los Alimentos y el Comité de Alergia Infantil de la SEAIC.
Sin tratamiento eficaz
En la actualidad la concienciación y el diagnóstico de las alergias alimentarias es mayor que hace unos años. Los alergólogos han puesto de manifiesto en el XXXIV Congreso Nacional de la SEAIC que esta es una de las causas que justifican que hoy en día se conozcan más casos, además de que las técnicas de diagnóstico han mejorado. De hecho, la tradicional prueba oral ha demostrado una viabilidad limitada debido a los riesgos inherentes y a los recursos requeridos, aunque sigue siendo la estándar para el diagnóstico. Las pruebas cutáneas, la determinación de IgE sérica específica y el desarrollo de nuevas técnicas moleculares reducen la necesidad de pruebas orales. “En esta línea, el diagnóstico por componentes alergénicos se propone como un método de diagnóstico más preciso, porque en lugar de utilizar extractos crudos de alérgenos, que constan de componentes alergénicos y no alergénicos, este método mide la IgE para proteínas alergénicas individuales. Pruebas como la activación de basófilos (BAT) también parecen ofrecer mayor sensibilidad y especificidad que las pruebas tradicionales. Por otro lado, la prueba de activación de mastocitos (MAT) ofrece otro enfoque prometedor y tiene la ventaja sobre el BAT de que utiliza plasma almacenado en lugar de sangre entera fresca” explican desde la SEAIC. A pesar de los avances continuos y el desarrollo de nuevas técnicas moleculares, sigue siendo difícil identificar una prueba de diagnóstico definitiva que elimine la necesidad de la técnica de exposición oral.
Ante la ausencia de un tratamiento eficaz, evitar el alimento y proporcionar la medicación de emergencia adecuada (autoinyector de adrenalina) solía ser el único enfoque para el abordar la alergia a los alimentos. Sin embargo, la inmunoterapia con alimentos se ha convertido en la primera modalidad de tratamiento activo establecida, que ahora está reconocida por directrices nacionales e internacionales. “Este tipo de alergia está en continua investigación y desarrollo. Desde hace unos años contamos con la opción de la inmunoterapia oral para conseguir la desensibilización. Sin embargo, las actuales líneas de investigación van más allá. Se quiere ofrecer una medicina de precisión y personalizada al paciente”, exponen desde los Comités.
✕
Accede a tu cuenta para comentar