Coronavirus

Así custodia la Guardia Civil el foco del contagio de Haro

Las autoridades sitúan el foco del contagio en un sepelio de Vitoria, donde se infectaron varias personas que luego no siguieron el protocolo sanitario

El enfado de los vecinos de Haro con parte de la comunidad gitana de la localidad es de órdago. «Han tenido que ponerles a la Guardia Civil en la puerta de casa para que cumplan con las medidas de aislamiento que les han indicado los médicos. ¿A ti eso te parece algo normal?», se quejaba una joven del municipio que, «solo como medida de prevención», ayer también se quedó en casa y ha puesto a sus dos hijos menores en cuarentena por temor al coronavirus.

Guardia Civil en Haro
Guardia Civil en Harolarazon

El foco del contagio en la localidad riojana parece claro para las autoridades sanitarias. Una familia de etnia gitana acudió a un velatorio hace un par de semanas en Vitoria, uno de sus miembros se contagió y lo ha ido propagando a sus familiares y vecinos. Al sepelio acudieron unas 60 personas, entre ellas, un hombre muy conocido en la zona. Aunque es originario de Haro, actualmente vivía a unos 7 kilómetros de allí, en la localidad de Casalarreina. Al parecer, este hombre notó los primeros síntomas y acudió al servicio riojano de Salud, donde después de hacerle el pertinente chequeo, dio positivo en Covid-19 y fue ingresado en el hospital de Miranda de Ebro (Burgos), donde estuvo ingresado desde hace una semana. Allí, al parecer, el paciente no siguió con el protocolo de aislamiento que se está aplicando estos días a todos los afectados. «Él se estuvo paseando por todo el hospital aunque le prohibieron salir de su habitación. El cabreo del personal sanitario era tremendo», explican fuentes cercanas a la familia. «Otros no querían hacerse la prueba y muchos se fueron a casa a pesar de que lo tenían». Durante los días posteriores la familia siguió haciendo vida normal y no tuvo ningún reparo en juntarse con otras sin ningún tipo de precaución, lo que ha derivado en un foco bastante elevado, porque ya suman 39 contagiados en familias de etnia gitana. Una de ellas forma parte de un extenso clan muy conocido en Haro, según fuentes cercanas. Pero la reticencia de algunas de estas familias contagiadas a permanecer en sus domicilios ha obligado a la Guardia Civil a hacer vigilancias a la entrada de sus viviendas para obligarles a cumplir con las medidas establecidas por Sanidad.

Guardia Civil en Haro
Guardia Civil en Harolarazon

Así, ayer se podían observar patrullas policiales en torno a estas viviendas y por la plaza Cruz de Haro, ya que es la zona donde suelen juntarse estas familias. Como el contagio inicial tuvo lugar durante un entierro, la Diócesis de Vitoria quiso aclarar que este evento no tuvo lugar en un templo católico y reiteraron que siguiendo las últimas indicaciones de la Conferencia Episcopal, ante las celebraciones de Cuaresma y Semana Santa recomiendan las diferentes medidas de precaución establecidas por Osakidezta (Servicio Vasco de Salud) y el Ministerio de Sanidad. Se trataría del segundo foco de contagio en un templo evangelista, ya que la semana pasada hubo otro caso similar en otra iglesia evangelista de Leganés.