Pointer y Braco alemán; dos campeones de la pluma

Son perros cuya forma de cazar y sus muestras harán gozar al cazador de grandes lances. En esta comparativa veremos los aspectos básicos de cada raza, así como su comportamiento en el campo para poder elegir el que mejor se ajuste a tus necesidades.

Tanto el pointer como el braco alemán son dos de las razas de perros de caza más populares y reconocidas en todo el mundo. Se adaptan de maravilla a la caza menor de nuestro país y bien adiestrados son unos cazadores excelentes. En muchas ocasiones elegir entre una raza u otra se torna cuanto menos difícil. Comparamos aquí diversos aspectos y cualidades de estas dos magníficas razas de caza.

Origen

El pointer tiene su origen en la Inglaterra del siglo XVII cuando unos cazadores ingleses comenzaron la cría de unos perros que se adecuasen a la caza con escopeta partiendo de bracos franceses, ingleses o españoles. Su propio nombre hace referencia a la muestra que realiza cuando caza, “apunta” donde está la presa.

Por su parte, el braco alemán surge sobre mediados de siglo XIX en las zonas germanohablantes de Europa debido a la necesidad de un perro versátil, un perro polivalente que sirviera para las diferentes modalidades de caza y no tener un perro distinto para cada una de ellas. Con las características cinegéticas deseadas ya conseguidas los criadores alemanes iniciaron la cría de esta raza y a finales de siglo obtuvieron el primer estándar de la raza del cual se tiene conocimiento.

Morfología

Ambas razas comparten muchas de sus características morfológicas presentando pelo corto y liso, tórax pronunciado y una gran musculatura. Orejas caídas y en el caso del braco alemán un hocico más pronunciado, siendo en el pointer la cabeza más corta.

Los colores habituales en el pointer son el naranja y blanco, marrón y blanco y negro y blanco. Pelajes unicolores y tricolores son igualmente correctos según el estándar de la raza. El braco alemán por el contrario es principalmente marrón y a partir de ahí puede variar con manchas blancas, cuerpo blanco con motas marrones e incluso podría llegar a ser color negro con los mismos matices mencionados para el marrón.

Inteligencia

Este es un aspecto un tanto polémico ya que en realidad depende de cada individuo y del tiempo que dediquemos al entrenamiento de nuestro compañero de caza. No obstante y según la lista de Stanley Coren de éxito demostrado en la cual ordena las distintas razas de perros según su nivel de inteligencia sitúa al braco alemán en el puesto 17 y al pointer en el puesto 43. El braco alemán es una raza que está más predispuesta al aprendizaje ya que Comprenden nuevas órdenes con entre cinco y quince repeticiones y obedecen a la primera orden el 85% de las veces o más. Se encuentra dentro del grupo de razas de trabajo excelentes. El pointer por su parte es clasificado dentro de las razas de inteligencia media en trabajo y obediencia y comprenden nuevas órdenes con entre veinticinco y cuarenta repeticiones. Obedecen a la primera orden el 50% de las veces o más.

Por lo tanto entrenar a un pointer exigirá un poco más de paciencia para que asimile las órdenes.

¿Cómo cazan?

Se nota en cuanto se les suelta en el campo que ambas razas están creadas para la caza. Su galope constante, su incansable persecución y olfateo hace que una jornada de caza con estos animales crezca en disfrute. El pointer y el braco son similares en su manera de trabajar desprendiendo un gran disfrute en su persistente búsqueda de piezas. Ambos tienen una gran resistencia física y un extraordinario olfato y en el momento de dar con la caza ofrecen unas muestras largas, armoniosas y tensas. Quizás en este aspecto el pointer queda algo por delante del braco porque ambos muestran a la perfección siempre se ha dicho que las muestras del pointer no tienen comparación. El pointer ofrece una muestra de estatua, totalmente inmóvil y con la certeza de la pieza hallada.

El braco alemán por su lado muestra una valentía soberbia. Es capaz de hacer frente a animales más grandes y peligrosos sin mostrar duda en ningún momento. También hace que se desenvuelva perfectamente en el agua mostrando un nado eficaz y rápido sin miedo al líquido elemento.

Sociabilidad

Ambas razas, como buenos ejemplares de caza, son idóneas para tener en casa. Cómo compañeros de familia se muestran fieles y muy cariñosos con todos sus miembros. No obstante, no debemos olvidar que son perros de caza y como tales necesitan realizar ejercicio y unas salidas más frecuentes y largas que otros animales de compañía.

Conclusión

Ambas razas son idóneas para la caza, de hecho, fueron seleccionadas en sus orígenes para tal fin. El pointer es quizás insuperable en la caza en mano tras codornices o perdices, su finísimo olfato y su única y espectacular muestra hacen de este perro un deleite en la caza. Por el contrario, el braco alemán es más polivalente y tiene una mayor inteligencia ofreciendo un aprendizaje más rápido y sencillo. Su bravura es espectacular y si optamos por esta raza tendremos un fiel compañero de cacerías durante años.