Investigación

Novedoso proyecto contra la Covid-19 que usa su material genético como diana

La Fundación laCaixa respalda el trabajo de José Gallego y su equipo en la Fundación Universidad Católica de Valencia

Gallego y su equipo de investigación de la Fundación Universidad Católica de Valencia
Gallego y su equipo de investigación de la Fundación Universidad Católica de ValenciaLa RazonLa Razón

A finales de marzo, poco después del inicio de la pandemia en España, muchos eran ya los grupos de investigación que focalizaron su labor en hallar nuevos tratamientos eficaces contra el SARS2-CoV-2, una vacuna o nuevos conocimientos respecto al virus. En este contexto, la Fundación «la Caixa» puso en marcha una convocatoria exprés inédita de CaixaImpulse centrada en la Covid-19, a la que desde el 27 de marzo hasta el 15 de abril se presentaron 349 proyectos, lo que supone casi diez veces más solicitudes de lo habitual en las convocatorias de este programa.

Seis fueron los proyectos seleccionados, entre los que se encuentra el de José Gallego y su equipo de la Fundación Universidad Católica de Valencia, en colaboración con el laboratorio Adolfo García-Sastre (Mount Sinai, Nueva York) y Vicente Marchán (Universidad de Barcelona). Su objetivo es «descubrir antivirales, moléculas, contra el virus causante de la Covid-19, que actúen sobre el material genético de éste, formado por moléculas de un ARN que tiene la peculiaridad de formar plegamientos capaces de alojar pequeñas moléculas que pueden actuar como fármaco», explica Gallego.

Estos plegamientos del material genético del virus se sabe que cumplen una función muy importante en el ciclo de replicación del virus, que necesita entrar en la célula y usar las moléculas ahí presentes, de manera que, si se logra bloquear los plegamientos, se interrumpiría sus ciclos de replicación.

Este proyecto, que es novedoso por cuanto se enfoca en usar como diana el material genético del virus, su ARN, se basa en el hecho de que estos plegamientos están conservados en otros muchos virus de la misma familia, es decir, que son muy parecidos, de manera que «si somos capaces de desarrollar un antiviral que interfiera en estos plegamientos conservados del ARN del virus, podría servir para tratar infecciones causadas por otros coronavirus que puedan causar brotes en el futuro, lo cual parece muy probable», señala el profesor de investigación de la Universidad Católica de Valencia.

El proyecto sigue dos estrategias diferentes. Por un lado, el testeo de un conjunto de pequeñas moléculas antivirales, que rondan la cincuentena, las cuales está comprobado que tienen actividad antiviral, uniéndose al ARN del virus e interrumpiendo su replicación, para comprobar si tienen actividad contra el SARS2 y, a partir de ahí, optimizar sus propiedades. Por el otro, el estudio del ARN del virus para identificar dentro del plegamiento una diana que esté conservada, que sea importante en la replicación del virus y que se pueda bloquear con una molécula, y por ahora ya se ha identificado alguna. Tras ese cribado e identificación de las moléculas que actúan sobre la diana, se optimizarán las propiedades y se desarrollarán antivirales.

Por ahora, el proyecto está avanzando en la primera de las estrategias. Ya se ha estudiado la colección de moléculas antivirales y se han identificado tres de ellas con actividad antiviral relevante en cultivos celulares, es decir que han demostrado poca toxicidad y concentraciones inhibitorias comparables al antiviral de referencia en la actualidad. Su optimización química está en curso y, paralelamente, se están llevando a cabo estudios que confirman que bloquean el ciclo de replicación del virus. “Con una molécula ya estamos en fase experimental con animales y hemos visto que ésta tiene actividad antiviral y propiedades farmacocinéticas positivas, es decir que tras estudiar cómo se distribuye el fármaco en el animal, se ha visto que se acumula en el pulmón. El siguiente paso es estudiar la dosis y la vía de administración más adecuadas”, comenta Gallego.