Magia de bar
¿Eres capaz de intercambiar el líquido de dos vasos de chupitos... sin utilizar otro recipiente?
Este interesante truco de bar alegrará la noche de tus acompañantes y, además, te permitirá ganar un poquito de dinero
Cuando nuestro círculo de amigos no ha cambiado desde que vamos al instituto, es normal que nuestros planes se hayan vuelto un poco… monótonos. Vamos al bar de siempre, rememoramos historias que todos conocemos (porque todos estuvimos allí para vivirlas) y hablamos de los mismos temas… una y otra vez.
Si tienes suerte y te has preocupado por cuidar bien a tus amigos, tú también te enfrentarás a este mismo problema. Pero no te preocupes, aquí te traemos la solución. O al menos un giro interesante que puede alegrar tu noche y la de tus amigos… o quién sabe, quizás incluso puedas ganar un poco de dinero.
Lo único que debemos hacer es buscar al más incauto de nuestros amigos y conseguir que caiga en nuestra trampa: Tenemos que apostar que podemos intercambiar el líquido contenido en dos vasos de chupito sin utilizar otro recipiente en el proceso. Puede sonar fantasioso, pero es posible. ¿No te lo crees? Pues tu acompañante tampoco se lo creerá... y por eso perderá la apuesta.
El truco de los dos vasos de chupito
El truco es muy sencillo. Lo único que necesitas para intercambiar el líquido contenido en dos vasos de chupito es una tarjeta de presentación o una carta y ser tú quién elija las bebidas que estarán contenidas en los dos vasos, que deben ser agua y whisky.
Llena los vasos a rebosar y coloca la tarjeta de presentación sobre el vaso de chupito lleno de agua. Después, colócalo boca abajo sobre el vaso de whisky (con una abertura sobre la otra). El movimiento tiene que ser rápido y la tarjeta de presentación o la carta tiene que estar bien sujeta sobre el borde… para que pueda “sellar” el vaso de agua en todo momento.
Luego tendrás que mover un poco la tarjeta. No mucho, porque no queremos retirarla... simplemente queremos dejar un pequeña ranura entre ambos vasos, para que los líquidos entren en contacto. Al ser la tensión superficial del agua mayor que la del whisky, ésta bajará y empujará el whisky hacia arriba.
Y en cuestión de un par de minutos, tendrás los dos vasos de chupito con el líquido contrario. Sólo quedaría volver a cerrar la ranura que habíamos dejado entre los dos vasos y retirar el vaso de arriba. Y ahí lo tienes: hemos intercambiado el líquido de ambos recipientes sin haber hecho uso de un tercero. El canal de YouTube “MundoWhisky” compartió un vídeo donde se puede comprobar que estetruco realmente funciona:
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