Lérida

El pederasta de Castelldans reconoce agresiones continuadas a menores y acepta 51 años de cárcel

El pederasta de Castelldans (Lérida) ha reconocido agresiones sexuales continuadas con acceso carnal a cinco menores, a uno de ellos durante diez años, y ha aceptado 51 años de prisión en el escrito de defensa que ha presentado su abogado en los juzgados de Lérida, ha asegurado a Europa Press la fiscal del caso, Pilar Mesalles. David D.C. tuvo acogidos en su casa desde finales de los noventa, en régimen de familia monoparental, a 14 menores tutelados por la Generalitat, todos varones.

Cuando fue detenido, en junio de 2013, convivía con tres adolescentes de 12, 15 y 17 años que la Generalitat trasladó a un centro de acogida; desde entonces está en prisión preventiva. En el escrito de defensa ha reconocido también agresiones a otro menor sin acceso carnal, un delito de utilización de menores para grabar material pornográfico con el agravante de ser su tutor y dos delitos contra la intimidad por grabar a dos jóvenes que había mantenido acogidos mientras tenían relaciones sexuales con sus novias.

El reconocimiento y la conformidad del acusado, David D.C., agilizará la sesión del juicio oral, prevista para la primera quincena, dará gran rapidez a las pruebas, lo que evitará a las víctimas revivir las agresiones, ha señalado la fiscal. La condena a 51 años --uno menos de los que pedía Fiscalía-- no significa que el pederasta, en prisión preventiva desde junio de 2013, cumpla este período en prisión ya que el Código Penal establece como máximo 20 años.

En el escrito de acusación en el que Fiscalía pedía 52 años la fiscal relata que de uno de los menores empezó a abusar cuando el niño tenía 10 años y continuó haciéndolo hasta que tuvo 18. Contaba la Fiscalía en su escrito que el acusado introducía a los menores acogidos en el contexto sexual a través de la visión de películas pornográficas, realizando masturbaciones en grupo y efectuando tocamientos.

Según la fiscal, a una de las víctimas el acusado lo grababa desnudo cuando se duchaba y juntos veían películas pornográficas. "Por la noche y con solo diez años el menor sufrió abusos del procesado que iba a su habitación de forma habitual y mantenía con él relaciones sexuales completas y masturbaciones", reza el escrito.

Fiscalía sostiene que estos abusos tuvieron lugar primero en el piso en el que el acusado vivía en Lérida y continuaron en la vivienda de Castelldans. David D.C. llegó a acoger hasta ocho menores simultáneamente en su casa tutelados por la Generalitat y pasó 34 controles en 16 años sin levantar ninguna sospecha.