El Papa en Mongolia

El imperio de Gengis Kahn

La tolerancia religiosa y la convivencia entre pueblos de fe diversa fue una de las características en los dominios del emperador mongol que en sólo 25 años conquistó más tierras que los romanos en 4 siglos

CIUDAD DEL VATICANO, 30/08/2023.- El papa Francisco saluda a los fieles este miércoles mientras dirige la audiencia general semanal en la sala Paolo VI de Ciudad del Vaticano, este miércoles. EFE/ Massimo Percossi
El papa Francisco saluda a los fieles este miércoles mientras dirige la audiencia general semanal en la sala Paolo VI de la Ciudad del VaticanoMassimo PercossiAgencia EFE

Cuando el avión papal haya aterrizado a las cuatro de la madrugada de la noche entre el jueves y el viernes, hora española, después de un viaje de nueve horas y media, lo hará en el aeropuerto internacional de Ulan Bator, que lleva el nombre de Gengis Kahn, el personaje más famoso de la historia milenaria de Mongolia.

Y cuando Francisco el sábado inicie su visita, lo hará en la plaza central de la capital dominada por una gigantesca estatua del gran condotiero que fundó en el siglo XIII el imperio mongol cuyas fronteras se extendían desde el Océano Pacífico hasta los bordes del Mediterráneo.Según los historiadores, en sólo 25 años conquistó más tierras que el ejército romano en 400 años y algunas estimaciones fiables calculan que Gengis Kahn dominó lo que hoy son treinta países modernos (China y la Federación Rusa entre ellos), con una población de tres mil millones de habitantes. Por lo tanto, no es una exageración afirmar que el mongol ha sido el imperio más extenso de la historia.

Sin entrar en la descripción de sus innumerables y siempre victoriosas campañas militares con un ejército muy adiestrado e indómito, el imperio de Gengis Kahn facilitó gracias a la Ruta de la Seda la comunicación comercial y cultural entre Asia y la cristiandad. Una de sus características fue la tolerancia religiosa de modo que algunos de sus generales eran cristianos y la convivencia entre pueblos de fe diversa resultó pacífica y sin guerras de religión. Otro aspecto destacable fue que la ley general que regía la vida de los ciudadanos de tan vasto imperio estableció una serie de medidas protectoras de los derechos de las mujeres.

No puede descartarse que en alguno de sus cinco discursos Francisco reconozca que, a pesar de los estragos causados en las poblaciones anexionadas al imperio, hay aspectos positivos en la gerencia del gran Gengis Kahn.