Advertencia

Una nueva investigación plantea preocupación por el uso de un electrodoméstico que tenemos en la cocina: no es el microondas

Este problema puede desencadenar riesgos para la salud como inflamaciones, trastornos hormonales e incluso enfermedades cardiovasculares

Una mujer cocina un plato catalán muy típico durante la Semana Santa
Una mujer cocina un plato catalán muy típico durante la Semana SantaUnsplash

Un reciente estudio ha encendido las alarmas sobre un riesgo ambiental ligado a un electrodoméstico que millones de personas utilizan a diario.

Investigadores de la Universidad de Queensland, en Australia, han demostrado que este aparato, tan habitual en los hogares, podría estar contribuyendo a la contaminación por microplásticos.

Según los resultados publicados en ACS ES&T Water y compartidos por Phys.Org, al lavar utensilios y recipientes de plástico en el lavavajillas, estos pueden desprender partículas microscópicas debido al calor elevado y la fricción que se produce durante el ciclo de lavado.

Un solo ciclo puede liberar alrededor de 920.000 partículas de micro y nanoplástico al agua residual. A lo largo de un año, esto equivaldría a 33 millones de partículas por hogar.

¿Por qué esto es un problema?

Los microplásticos son fragmentos de plástico tan pequeños que miden menos de 5 milímetros. Aunque invisibles a simple vista, su impacto en el medio ambiente y la salud humana es cada vez más evidente.

Estos residuos no se biodegradan, sino que se fragmentan en partículas aún más diminutas, las cuales se filtran en los océanos, el suelo, y eventualmente terminan en la cadena alimenticia.

Gran parte de nuestros residuos de plástico acaba en el mar y libera microplásticos
Gran parte de nuestros residuos de plástico acaba en el mar y libera microplásticosSMRDominio público

Estudios recientes han vinculado la presencia de microplásticos en el cuerpo humano con problemas de salud como inflamaciones, trastornos hormonales e incluso enfermedades cardiovasculares.

¿Qué se puede hacer al respecto?

Aunque el lavavajillas no es la principal fuente de microplásticos a nivel global, el estudio destaca la importancia de pequeñas acciones cotidianas que, al repetirse, pueden tener consecuencias a gran escala.

Los expertos sugieren usar filtros que capturen residuos antes de que entren al sistema de aguas residuales, o simplemente optar por lavar los plásticos a mano y con agua templada para evitar el desgaste.

Además, se recomienda reducir el uso de utensilios de plástico y elegir alternativas más sostenibles como vidrio, cerámica o madera.