Atención Primaria

Los médicos critican a Sánchez: "Su plan es un brindis al sol"

Los profesionales reclaman más personal en lugar de mejoras estéticas y de infraestructuras en los centros de salud

Pedro Sánchez lo anunció el pasado sábado en Valencia durante uno de los principales actos de campaña de las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo: el Consejo de Ministros aprobaría hoy martes una partida de más de 580 millones de euros para reforzar los centros de Atención Primaria en toda España. El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE proclamaba así un nuevo avance en la puesta en marcha del Plan de Mejora de Infraestructuras de Atención Primaria, una iniciativa cuyos criterios de distribución fueron aprobados a mediados de abril por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. Este plan, publicitado como la “mayor inversión que se ha realizado desde el Gobierno para robustecer la Atención Primaria”, contempla el reparto de 580,998 millones de euros entre los 13.122 centros de atención primaria (3.055 centros de salud y 10.067 consultorios locales) existentes en nuestro sistema nacional de salud para financiar la ampliación y renovación del equipamiento de las unidades de fisioterapia, radiodiagnóstico y urgencias. Sin embargo, la eminente aprobación de esta inversión no ha conseguido complacer a las sociedades científicas de Atención Primaria, las cuales coinciden en señalar que se trata de “un brindis al sol”.

“No creo que sea en el ardor de un mitin electoral el mejor momento para hacer este tipo de promesas cuando han estado 4 años en el Gobierno y no han hecho nada. Y menos, anunciarlas como un mérito cuando, en realidad, han recortado dejando en 580 millones los 1.000 millones que prometieron en el Consejo Interterritorial celebrado en Lanzarote”, comenta José Polo, presidente de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen). El portavoz de esta sociedad científica no solo reprocha las formas y artificios del ejecutivo, el doctor se muestra crítico principalmente con el fondo de la cuestión. “Es un brindis al sol. Han prometido 580 millones de euros sin tener una hoja de ruta cuando esta es básica. El Sistema Nacional de Salud cuenta con 13.122 centros de atención primaria, muchos de los cuales requieren mejorar el equipamiento de fisioterapia, radiodiagnóstico y urgencias, pero otros no. Tienen otras necesidades. Por ello, hace falta trazar un verdadero plan integral dialogado que apueste por resolver los retos reales que tiene la atención primaria”, denuncia. En su opinión, las prioridades del Gobierno deberían ser: analizar la gestión de la demanda asistencial, es decir, desburocratizar la atención primaria para que el médico vea pacientes; potenciar la formación para aumentar la capacidad de resolución de los médicos de atención primaria, es decir, quitar trabas administrativas a la hora de solicitar pruebas diagnósticas o de recetar medicamentos que tienen visados; y realizar un plan de recursos humanos y de reestructuración para evitar los colapsos que se están sufriendo en los centros de salud. “Esperamos que cuando pase todo este ruido electoral se plasme un verdadero plan en los Presupuestos Generales del Estado”, concluye.

Desde la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) coinciden en señalar el comportamiento oportunista de Pedro Sánchez. “El uso electoralista de este plan es absolutamente negativo y perverso porque las promesas previas a las elecciones se pueden quedar en el aire y porque la frase grandilocuente que maneja el presidente de que es la mayor inversión, en realidad, se trata una miseria”, indica Lorenzo Armenteros del Olmo. El portavoz de la SEMG lamenta que este anuncio “no deja de ser más que un brindis al sol”. “Este plan dota de infraestructura y tecnología a centros de salud con el único objetivo de reducir la demanda hospitalaria. No vemos ninguna intención real de mejorar la atención primaria. Quieren maquillar con dinero, y hacerlo con infraestructuras y tecnología, los problemas estructurales que tenemos: los recursos humanos y las condiciones de trabajo. Esto va a dar lugar a que el paciente se trate con la mejor tecnología en centros vacíos porque no se ha velado por un recambio generacional que evite esta reducción paulatina de médicos que estamos viviendo desde hace años”, señala. Y es que, este recambio generacional junto con la dignificación de las condiciones de trabajo son para SEMG los problemas que deberían priorizarse tanto desde el Gobierno central como desde las comunidades autónomas: “Nadie puede evadir su responsabilidad”. Lorenzo Armenteros del Olmo lamenta que, desde 2022, la inversión en Atención Primaria es insignificante: “A veces se nos olvida que el 70% de las necesidades de salud de una población acuden a la AP y son resueltas aquí. Pese a ese 70%, en 2023 solamente se ha dedicado a AP el 14,99% del presupuesto, tres décimas más de la inversión que se hizo en 2022. Es un crecimiento insignificante. Esto demuestra la escasa valoración que se tiene de AP desde el gobierno central y desde las CCAA”. El portavoz de SEMG puntualiza que a través de este Plan se cometen varios errores: “Ante una realidad se pueden ejercer acciones u omisiones. Aquí se cometen acciones negativas porque no se está invirtiendo en lo que verdaderamente se necesita y omisiones de todos los responsables de implicarse de una vez por todas. Esta implicación pasa por un pacto global de la sanidad sacándola de la política de forma radical”.

Susana Aldecoa, vicepresidenta primera de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), alaba la inversión del Gobierno. Sin embargo, advierte que el dinero procede de fondos europeos, lo cual significa “que es una inversión puntual, finalista, que se acaba ahí. No es una financiación estable para la sanidad”. “Las infraestructuras y el aparataje son una de las muchas necesidades que tenemos, una necesidad muy importante. Pero, en paralelo, necesitamos financiación para resolver los problemas de recursos humanos, de la adaptación de modelo y otros retos actuales derivados de la evolución del paciente y de la patología. Hay que hacer un plan a largo plazo y todos, Gobierno y autonomías, deben hablar ya de una financiación de Atención Primaria adecuada”, subraya.