El «catastrazo» aprobado por Salgado dispara el IBI un 46% en 2011
A los ayuntamientos se les presenta difícil la resolución de una ecuación: cómo reflotar sus arcas sin asfixiar a los contribuyentes. El incremento de la recaudación es fácil por la vía de los tributos, pero la subida de impuestos no puede ahogar a los ciudadanos