5 trucos para reducir nuestra tarifa telefónica

De acuerdo con datos de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC), la factura telefónica no ha dejado de crecer en los últimos años y actualmente nuestros gastos en este apartado promedian los €69 mensuales. El uso frecuente de internet, las descargas de contenido y las compras de móviles a plazo suman cada vez más. Si a eso le agregamos el desconocimiento de la letra pequeña, tenemos la razón por la cual las tarifas aumentan anualmente. Pero hay trucos para reducir nuestra tarifa telefónica.

1) Aprovechar la competencia

Nos podemos considerar afortunados si no recibimos, una vez por día, una llamada de un operador que nos ofrece una tarifa más baja… sea cual sea la que estemos pagando. Si aprovechamos esta llamada para rebajar la tarifa o aumentar los servicios (internet ilimitada, acceso a servicios de streaming como Netflix, HBO o Amazon), podemos sacar provecho.

2) Unificar servicios

Ya que hablamos de servicios, para ahorrar es necesario perder un poco de tiempo. Quizás la operadora nos esté cobrando más por el servicios de streaming que su precio unitario. Quizás ni siquiera lo usemos. Algunas empresas ofrecen, junto a la tarifa telefónica, televisión. Si tenemos una TV inteligente, no tiene sentido pagar por este servicio ya que gran parte del contenido es fácilmente accesible de modo gratuito, por ejemplo con Pluto TV. O, por el contrario, puede que nos guste tenerlos todos. De este modo, si solicitamos , podemos negociar un precio alternativo si combinamos todos los servicios juntos. Tampoco tiene sentido, en la mayoría de los casos, tener una línea de telefonía fija, ya que casi nadie habla por teléfono desde casa con el fijo.

3) Tarifa familiar

Una clave es reducir la tarifa telefónica sumando miembros de la familia: hijos, padres, parejas, abuelos… Si adquirimos un paquete de 4 móviles será mucho más económico que 1 individual multiplicado por cuatro. Y eso nos permitirá obtener una tarifa con datos ilimitados u otros servicios que nos interesen.

4) Leer la factura

Cuando nos llaman de la nueva operadora y nos ofrecen una tarifa tentadora, aceptamos. El problema es que rara vez leemos la letra pequeña. A veces incluyen cláusulas como el establecimiento de llamada. Otras el exceso de datos se paga muy caro. Las cuotas de línea también forma parte de la letra pequeña y no siempre se menciona en la oferta. Esos son los datos que tenemos que buscar y a los que estar atentos a la hora de perseguir la mejor tarifa, una combinación de nuestras costumbres (nuestro tiempo de uso, cantidad de llamadas, frecuencia en internet, etc.) y la oferta del operador.

5) La amenaza

Si hay algo que es obvio es la cantidad de operadores telefónicos que hay en el mercado. Y todos ellos buscan nuevos clientes. Si tenemos permanencia con uno, el otro nos ofrece pagarla. Y aquí es cuando tenemos una ventana para reducir la factura: aceptar la oferta nueva. En menos de una semana nos llamará la primera compañía para decirnos que les ha llegado el comunicado de portabilidad y que quieren saber el motivo. Al decirles el precio nos harán una oferta mucho más económica si nos quedamos. Una que está reservada para nuevos clientes y que no suelen decirla. A partir de ese momento, comenzarán a competir entre las dos firmas para hacerse con nosotros como clientes. Nosotros solo tenemos que sentarnos y observar el espectáculo.