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El gadget del sábado: Samsung Galaxy Fold 7, potencia desplegada
Se trata de uno de los primeros plegables en los que llama más la atención su procesamiento y su cámara que sus “dobleces”.
Ya a simple vista se nota que algo ha cambiado: ha reducido su grosor casi un cuarto (de 12 mm a 8,9 mm) y su peso ha bajado unos 26 gramos, más de un 10%. Y todo ello ganando en potencia, cámara y sin perder batería. Eso sí, el precio ha aumentado un poco y partimos de 2.100 euros.
¿Cuál es la virtud del Fold 7? Si tuviéramos que sintetizar, diríamos que es el primer plegable en forma de libro que mantiene las prestaciones de un smartphone sin ser más pesado o grueso que su “hermano convencional”. La pantalla AMOLED pasa de 6,5 pulgadas a 8 con apenas una leve percepción en la bisagra cuando pasamos la mano. En este aspecto hay que destacar que la pantalla exterior es similar a la de muchos móviles por lo que la sensación de llevar un plegable con una pantalla mínima, desaparecer.
Lo que no se ha esfumado es la sensación de abrir el móvil y no saber exactamente cómo las primeras veces. No sé si tiene que ver con la fragilidad que le asociamos a los plegables y la apertura o a otro factor, pero siempre vamos con cuidado.
En lo que respecta a memoria, mantiene la igualdad en la parte base: 12 GB/256 GB, solo que en el Fold 7 aparece una opción de 16 GB / 1 TB. La batería tampoco ha aumentado mucho (de 4.300 mAh a 4.400 mAh), pero teniendo en cuenta que este es mucho más delgado, esta ganancia, mínima, pero real, es ya un logro.
En cámaras pasamos de una frontal de 10 MP a duplicar estas y en las principales se ha apostado fuerte: de 50 MP a 200 MP, más una 12 MP que ya teníamos y sumándole una 10 MP más. ¿Fotografía? Digamos que se basa en la fuerza bruta de los megapixels. Es muy buena, sí, pero no es un móvil en el que la fotografía sea la prioridad.
El Fold 7 se ha creado para ser inteligente, no para ser una cámara montada a un móvil. Y aquí es donde Samsung ha montado un Snapdragon 8 Elite para Galaxy, el procesador más avanzado de Qualcomm. Ambas compañías han trabajado no solo para que este microchip sea lo más eficiente posible, también para reducir su impacto en la batería y para ser fluido en las funciones de pantallas múltiples.