Samsung Galaxy Z Flip5: la estrella de la pantalla

Los últimos lanzamientos de Samsung, muestran una apuesta fuerte por su línea Galaxy Z. Si el Fold 5 mejoró en aspectos fundamentales como la batería, la cámara y la bisagra, el Flip5 también muestra cambios positivos y la estrella es la pantalla secundaria.

En este apartado la pantalla secundaria no solo ha pasado de 1,9 pulgadas a 3,4 pulgadas, casi duplicando su tamaño, ahora trae características más allá de solo ser más visible. La ampliación tiene sentido en dos aspectos, no solo agiliza la visión de notificaciones y permite ver mejor cuando hacemos un selfie, ahora permite interactuar de una forma más eficaz con el teléfono: se pueden ejecutar aplicaciones completas.

Si bien es cierto que la mayoría son de Google (Maps o YouTube, por ejemplo), también es posible abrir Netflix y WhatsApp, entre otras. Obviamente, cuando el teléfono se abre, el contenido continúa en la pantalla principal desde el mismo momento. A medida que pase el tiempo, el número de aplicaciones que se pueden desplegar en la pantalla secundaria serán más, solo hay que adaptar parte del software, algo que Samsung está facilitando a los desarrolladores.

Esto tiene la ventaja de reducir el consumo de batería de manera drástica. Si a eso le agregamos que el Flip5 incluye el Snapdragon 8 Gen 2, que resuelve muchos de los problemas de calentamiento de la generación anterior, la batería, a pesar de mantener la misma capacidad (3.700 mAh) tiene un rendimiento mayor.

La memoria de procesamiento se mantiene en 8GB, pero la simbiosis con el nuevo procesador también la lleva a una mayor eficacia. Otro aspecto que destaca es su software, desarrollado en conjunto con Google y también contribuye a extender el rendimiento de la batería y la transición entre pantallas. La carga podría ser más rápida, es cierto: no pasa de los 25W.

Tampoco hay demasiados cambios en el aspecto fotográfico: dos cámaras traseras de 12 MP cada una y una frontal de 10 MP. Si queremos un plegable con buena cámara, habrá que irse al Fold5. Lo que sí comparte con su hermano mayor es el cambio de bisagra. Aquí Samsung ha dado el mismo salto que en la pantalla secundaria: el espacio al plegarse se ha reducido notablemente y tiene un formato casi libro, cuando antes había una línea diagonal que dejaba luz. El avance también extiende la vida útil de la bisagra, fundamental en un plegable.

El Flip5 está disponible a partir de €1200 en azul, crema, negro, gris y azul.

Veredicto:

El salto de pantalla secundaria y la mejora en el procesador lo han elevado en diferentes niveles. Es uno de los smartphone más interesantes. Si la cámara fuera un poco mejor, sería de los mejores móviles del mercado.