Sucesos

Confiesa en televisión que asesinó a su madre: "Sí, la maté. No podía soportarla más"

La hermana menor descubrió el cadáver en la cama asfixiada con un cordón alrededor del cuello

Lorenzo Carbone en un momento del directo
Lorenzo Carbone en un momento del directoLa Razón

La ciudad de Módena se despertó conmocionada este fin de semana pasado cuando las fuerzas policiales descubrieron el cuerpo de una mujer asesinada en su casa. Inmediatamente se ordenó busca y captura para el hijo de la víctima, Lorenzo Carbone, sospechoso de la muerte violenta de Loretta Levrini. Tras 24 horas desaparecido, Carbone volvió a su casa y se derrumbó delante de una cámara de la televisión italiana del canal Pomeriggio Cinque: "Sí, la maté".

Desde la noche del pasado domingo Lorenzo estaba siendo buscado por las autoridades para preguntarle por la muerte de su madre. El lunes regresó a su vivienda tras 24 horas huido y en a puerta de su casa en Spezzano di Fiorano Modenese se encontró a un equipo de televisión. Al ser preguntado por el incidente, Carbone rompió a llorar mientras confesaba en directo el crimen. Tras escuchar su declaración para la televisión en directo, el periodista, Fabio Giuffrida, llamó a las autoridades que detuvieron a Lorenzo y lo llevaron a dependencias policiales.

El fugitivo, que confesó que había desaparecido porque "quería alejarme", habría discutido con su madre antes de asesinarla según su propia confesión. El cuerpo fue encontrado por la hija de Loretta a las cinco de la tarde. La mujer se encontraba en su cama estrangulada con un cordón alrededor del cuello. Sus gritos atrajeron a vecinos que inmediatamente llamaron a la policía. Desde el principio, las sospechas recayeron sobre Carbone por no encontrarse en el lugar ni localizable. Según los vecinos, la familia era muy conocida pero extremadamente reservada, con una madre mayor con ciertas patologías, y un hijo al que no se le conocía un trabajo estable desde hace tiempo. El sábado, según las autoridades, Lorenzo fue a buscar unas pizzas para compartir con su madre y posteriormente cometió el asesinato. El encargado de la pizzería fue el último en ver al hombre de 50 años momentos antes del asesinato. “Vi a Lorenzo el sábado por la noche. Parecía estar bastante tranquilo. Incluso bromeamos sobre el mal tiempo de estos días. Nunca se me habría ocurrido semejante hecho cometido por él”, confesó.

Durante la entrevista en directo, Carbone confesó el crimen con todo lujo de detalles: “Sí, la maté. No podía soportarla más. Recientemente tuvimos algunas discusiones y eso me enfadó". Según su relato de los hechos, "la asfixié, primero con una almohada, después solo con la funda y finalmente utilicé unas cuerdas”. Visiblemente derrumbado Lorenzo confirmó que se trató de "un instinto. Lo siento mucho. No sé por qué lo hice”.