Omar Montes en "El Hormiguero": "He cortado un Ferrari para subirlo al escenario; de segunda mano, no soy tonto"

Empezó la semana fuerte en "El Hormiguero 3.0" que presenta Pablo Motos en Antena 3. Este lunes el artista Omar Montes se sentó con el valenciano para hablar de la gira de su último disco 'Quejíos de un maleante', que arrancará el próximo 21 de abril en Albacete. El de Carabanchel habló de dinero, ferraris y pesadillas. Y volvió a dar dinero por teléfono...

Los primeros compases fueron para hablar de las joyas que siempre lleva Montes, en manos y cuello. "A ver jefe… vamos bien de oro… vamos bien de diamantes… pero no entiendo la correa…", le dijo Motos, a lo que Montes bromeó con que "la seguridad es lo más importante… hay que venir siempre bien apretado. Es lo que se lleva ahora y estoy siguiendo las tendencias…". El tema del dinero siguió derivando la conversación hacia lo que pasa cuando tienes más de un millón de euros y las locuras de su gira con "los maleantes". "Todos los que he ido recolectando por mi barrio, somos ya 45 personas… 45 personas que salen en la performance, todos de mi barrio y maleantes y cada uno hace algo… unos las palmas, otro el bajo, otro violín… todos son válidos y cada uno tiene su cometido. Es una gira de flamenco y reguetón… mezclarlo es complicado… Hay una línea fina para mezclar flamenco y reguetón... al que le gusta el flamenco dice por qué me metes reguetón… y al que le gusta el reguetón dice por qué flamenco… nunca llueve a gusto de todos", confesó el cantante.

Pablo quiso hacer hincapié en la última excentricidad del madrileño: "Los del circo del sol está acojonados de la performance, hay un Ferrari…". El artista dio todo lujo de detalles: "Tuve que mirar para traerlo de Alemania que es más barato… He comprado un Ferrari, lo he cortado para poder subirlo a los escenarios, le he quitado el motor y todo lo que pesaba… lo he descapatado… he contratado a un bailaor de flamenco Daniel Caballero, que sube al Ferrari y baila… yo también en algunas canciones. Le he puesto la matrícula del Principito que no falte… y alguno dice vaya crimen que has hecho con el pobre Ferrari, pero a mí me hacía ilusión llevarlo de gira y utilizarlo como instrumento". Efectivamente también quiso aclarar que no era nuevo: "era de segunda mano, porque joder tampoco soy tonto".

Amigos falsos

El presentador valenciano quiso saber entonces qué es lo que cree que pasa Montes cuando "tienes más de un millón de euros". Omar explica que en una reflexión con su amigo Luis, y "a veces es irónica la vida, cuando no tenía, iba con un amigo compraba un café y valía un euro, y como mi amigo sabía que ese euro era lo que tenía decía lo gasta en mí, qué guay, era agradecido". Sin embargo, se ha dado cuenta según narra, que" ahora que la gente sabe que uno tiene dinero, es como que está obligado a pagar en todos los sitios, da igual cuántos seamos, y de cuánto sea la cuenta…" y le "molaría" que alguna vez alguien haga aunque sea el gesto de aportar: cuando va a pasando el tiempo la gente se cree que cuanto más dinero tienes,… como que la gente cree que tú no lo haces de corazón… es lo normal que el tío pague, porque tiene pasta" ´

"¿Cuándo tienes dinero cómo sabes que un amigo lo es de verdad y cuando es un interesado?", quiso saber Motos y Montes habló de hacer el gesto de "sacar la cartera", aunque sabe que "a muchos los dejas que te rodeen aunque sepas que se aprovechan, tú también te sientes en deuda porque los conocías de toda la vida o porque han hecho cosas buenas para ti… aunque en este momento a lo mejor no estés haciendo tanto porque estén acomodados, pero tú te sientes el padre". Y recordó el presentador la opinión de Georgina sobre el dinero: "le pregunté si el dinero te cambiaba y me dijo que no…". Pero el cantante no estaba de acuerdo, porque "inevitablemente te cambia", aunque , "lo políticamente correcto es decir que no". "Yo antes iba al Zara, cogía un pantalón y lo primero que hacía era mirar el precio, ¿cuánto vale? Ahora voy al Zara y miro lo que me gusta y lo cojo", ejemplificó como cambio.

En cuanto al episodio qatarí en el que ocurrió algo bastante surrealista: "Fuiste a Qatar y gritaste vivan las mujeres, viva el amor libre y que cada uno esté con quién le dé la gana… cómo sigue la historia…", preguntó Motos. En eso el artista fue muy claro: "casi nos matan, pero por lo menos estoy aquí hoy gracias a dios". Habló entonces de que en Qatar aquello "se lo tomaron medio mal", e incluso un "amigo" suyo recepcionista del hotel le puso sobre aviso: "han venido preguntando por ti… tiene mala pinta, date un paseo y mejor no vengas". Primero consiguió zafarse, pero acabó escondido en una lavandería y solo salió cuando le avisaron de su inminente vuelta en avión. "Dos o tres horas… estuve. Con el móvil guasapeando con mi madre y mi abuela, si veis que no vuelvo, os quiero mucho… hice los deberes por si acaso". Y aunque reconoce que quizá no fue el mejor momento, "yo tenía que reivindicar las cosas nuestras: vivan los gitanos, el amor libre… cada uno es libre de irse con quién le dé la gana".

La pesadilla

"Tienes una pesadilla recurrente, que te persigue alguien y que tú no puedes correr", le preguntó Motos, a lo que el de Carabanchel contestó narrando la que se le repite: "Sí, macho, me tiene eso fastidiadillo, porque me da una impotencia y ansiedad, me pongo malo. No sé qué me pasa, que en sueños, viene una persona corriendo sin rostro quiero huir pero no puedo porque tengo los pies clavados… y cuando ando no voy veloz. Y otra, casi peor en la que " estoy con los amigos de risa… y se me caen los dientes".