Antena 3 abre otro frente: el melodrama bélico

La cadena estrena la ficción de Atresmedia Series «Tiempos de guerra».

Entre los complejos que arrastraba –ya se puede hablar en pasado– la ficción española era cómo abordar una serie bélica. Y si encima se traslada a otra época, todas las cadenas y productoras se echaban para atrás. Bien sea por cuestión de presupuesto o por el temor razonable a que fuesen comparadas con otras propuestas estadounidenses, sobran casi todos dedos de las manos para citar alguna. Hasta ahora, porque Atresmedia TV, en colaboración con Bambú Producciones, ha saltado al vacío con «Tiempos de guerra», que se estrena hoy en Antena 3 en horario «prime time».

La primera premisa para que este melodrama bélico funcione es que sea creíble la ambientación y que las escenas de combate no sean pacatas. En los primeros cinco minutos ya se ha desplegado toda la artillería. En sentido literal. Unos rótulos sitúan a la audiencia: es el 22 de julio de 1921 y el ejército español lucha contra los rifeños de Abd el-Krim, cerca de Annual. Lo que sigue son secuencias del frente que, con toda la intención del mundo, están rodadas de forma trepidante. En cuestión de segundos se pasa de un plano a otro –ahí se nota la notable labor de montaje– con un ritmo frenético. Se pretende reflejar el caos que se vive en el frente y se logra. Y es que en el cine como en la televisión los directores y realizadores, con distinta fortuna, tomaron nota de la vibrante primera media hora de «Salvar al soldado Ryan» (1998), de Steven Spielberg.

La mayor audiencia

Puesto que «Tiempos de guerra» está pensada para una televisión en abierto que pretende llegar a la mayor audiencia posible, es bueno ir al meollo con premura y presentar a los personajes. Tras mostrar la devastación que se está viviendo en el frente, la trama se traslada al Madrid aristrocrático en el que se desenvuelven las protagonistas, Carmen de Angoloti (Alicia Borrachero), Julia Ballester (Amaia Salamanca), Pilar Muñiz de Solaruce (Verónica Sánchez), Magdalena Medina (Anna Moliner) y Verónica Montellano (Alicia Rubio). Lideradas por Angoloti, estas Damas Enfermeras auspiciadas por la reina Victoria Eugenia se trasladan a Marruecos. No tardan en vivir, sin apenas experiencia, su inmersión en la trastienda de cualquier conflicto bélico: los heridos de gravedad, los cadáveres y las situaciones de peligro. En «Tiempos de guerra» hay sangre, mucha, y heridas en las que se intuyen las vísceras. Ni Atresmedia Series ni Bambú han querido edulcorar lo que sucede, en el frente, lo que, por otra parte, hubiese sido un error. La serie no tiene intención didáctica, es una producción de entretenimiento, pero sin esos elementos el resultado hubiese sido un producto descafeinado. Fiel al espíritu de Antena 3 en sus colaboraciones con Bambú («Gran Hotel»), también hay lugar para el melodrama romántico, que se empieza a intuir en el primer capítulo, donde se van estrechando lazos, se perciben conflictos y se confirman que cada una de las enfermeras tienen muchas cuentas pendientes que solucionar.

En este reparto coral es imposible no citar los duelos interpretativos de esgrima dialéctica entre los personajes que encarnan Alicia Borrachero y José Sacristán, que encarnan a Carmen de Angoloti y Vicente Ruiz. Ella es la responsable de las Damas Enfermeras y él, jefe de la Sanidad Militar de Melilla. Ahí está el principal choque de trenes de esta serie, porque su forma de entender la gestión sanitaria está en las antípodas. Garantizan grandes momentos en esta ficción, que cumple con lo que promete: una serie con una madurez narrativa que puede conectar con todas las franjas de edad y que concilia con acierto su voluntad de abrir un nueva vía en la ficción patria: el género bélico con el intimismo.