Senderos y mágicas rutas para exprimir el otoño en la provincia de Cádiz

Las hojas caídas ya visten el suelo, mientras los tonos dorados de los árboles tiñen el paisaje de nuestros bosques, creando una escena idílica que nos invita a colarnos en ella. Porque el otoño se convierte en una época perfecta para disfrutar del campo y de la naturaleza, observando tanto el suelo como el cielo, deleitándonos con todo lo que nos regala.

Puestos a elegir un destino en el que aunar todo ello merece la pena decantarse por la provincia de Cádiz, ya que, además de espectaculares playas en su costa, también presume en su interior de tener uno de los parques naturales más ricos del sur de la península, el Parque Natural Sierra de Grazalema, con las cimas más altas de la provincia de Cádiz, con algunas especies únicas y con numerosas rutas para los más aventureros, tanto para realizar de forma individual como en pareja, en familia o con amigos.

El parque natural Sierra de Grazalema fue declarado Reserva de la Biosfera por la Unesco en 1977, convirtiéndose en uno de los dos primeros espacios naturales que logró esta consideración en España, lo que da cuenta de su importancia. Para empaparse de todo lo que ofrece una entretenida opción puede ser la visita al jardín botánico El Castillejo, en El Bosque.

El viaje puede continuar hasta el mirador del puerto de El Boyar, que nos regala una panorámica de las sierras de El Pinar y El Endrinal, con algunos de los accidentes geográficos más llamativos, como el Salto del Cabrero, mientras que en el mirador del puerto de Las Palomas podemos observar especies de aves protegidas, como buitre leonado, collalba negra, roquero solitarios...

Y si el cuerpo nos pide hacer algo más que mirar, por aquí la diversión está asegurada, ya que la erosión producida por el agua ha creado cañones de gran belleza, como la Garganta Verde que, con 400 metros de profundidad, garantiza al viajero un magnífico descenso. Este espectacular cañón de roca originado por el azote de las aguas del arroyo Bocaleones acaba en una cavidad llamada Cueva de la Ermita o Ermita de la Garganta, por el parecido con la cúpula de un templo religioso. Además, este enclave es el hábitat de una importante colonia de buitres leonados. Se trata de una zona de acceso restringido por lo que hay que solicitar autorización a la Consejería de Medio Ambiente.

La aventura puede continuar si, pasado Chiclana, nos incorporamos a la A-390 para entrar de lleno en la comarca de La Janda. Merece la pena para en el centro de visitantes El Aljibe está, en Alcalá de Los Gazules, pues recrea las formaciones vegetales de la otra gran sorpresa natural de la provincia de Cádiz: el Parque Natural Los Alcornocales, considerado la «última selva de Europa». En pleno otoño, recorrer este paraje natural resulta todo un espectáculo para los sentidos, ya que la berrea del ciervo está en su momento cumbre, con sonidos y estampas dignas de recordar.

Hacia el sur de Los Alcornocales, cerca de Algeciras, la aventura puede terminar realizando el sendero que recorre la ribera del río Miel entre elementos naturales y culturales. Las posibilidades de entretenimiento al aire libre son casi infinitas, siempre aderezado, además, de una deliciosa y típica gastronomía para recuperar fuerzas.