Descifrando el origen: ¿Por qué el Día Mundial de los Animales es el 4 de octubre?

Cada 4 de octubre, el mundo se une para celebrar el Día Mundial de los Animales, una fecha con un propósito profundo que coincide con la festividad de San Francisco de Asís, el patrón de los animales y del medio ambiente.

El Día Mundial de los Animales fue establecido en 1929 por la Organización Mundial de Protección Animal (OMPA) durante un congreso celebrado en Viena. Desde entonces, cada año, el 4 de octubre se convierte en una oportunidad para reflexionar sobre nuestra relación con los seres vivos que coexisten con nosotros y sobre el impacto de nuestras acciones en el entorno natural.

Sin embargo, es interesante señalar que la primera vez que se celebró el Día Mundial de los Animales no fue el 4 de octubre, sino el 24 de marzo de 1925. Este evento inaugural fue organizado por Heinrich Zimmerman, un alemán que era escritor y editor de una revista dedicada al bienestar animal. Zimmerman utilizó esta plataforma para promover sus ideas sobre el cuidado de los animales y finalmente estableció el Comité del Día Mundial de los Animales.

El primer Día Mundial de los Animales se llevó a cabo en el Palacio de los Deportes en Berlín, Alemania, y atrajo a aproximadamente 5,000 personas. Inicialmente, Zimmerman había deseado celebrar el evento el 4 de octubre para coincidir con la festividad de San Francisco de Asís, el santo patrón de los animales, pero no pudo reservar el lugar en esa fecha y optó por el 24 de marzo. Eventualmente, en 1929, el evento se trasladó al 4 de octubre, y en el Congreso Internacional de Protección Animal de 1931, se oficializó esta fecha como el Día Mundial de los Animales.

San Francisco de Asís, una figura clave en esta celebración, nació en Italia en 1182. Durante su vida, dedicó su existencia a promover el bienestar de todos los seres vivos en la Tierra y consideraba a los animales como "hermanos" e "hijos de Dios". Fue el Papa Juan Pablo II quien lo declaró Patrono de los Animales y de los Ecologistas.

El Día Mundial de los Animales nos brinda una oportunidad invaluable para reflexionar sobre nuestra relación con los demás seres vivos y tomar conciencia del impacto de nuestras acciones en el medio ambiente. Numerosas especies se enfrentan a amenazas como la caza furtiva, la pérdida de hábitat, el cambio climático, la contaminación, el tráfico ilegal y el maltrato.

Para conmemorar este día y contribuir al bienestar de los animales, podemos tomar diversas acciones, como adoptar o apadrinar a animales necesitados, colaborar con organizaciones de protección animal, educarnos sobre sus necesidades y derechos, participar en actividades que promuevan el respeto hacia los animales, denunciar casos de abuso, reducir el consumo de productos de origen animal, evitar la compra de animales exóticos y apoyar iniciativas legislativas y políticas que promuevan la protección y conservación de los animales y sus hábitats.