Ciencia

Un investigador de la UMA refuta que el vuelo propulsado apareciera en dinosaurios que no fueran aves

El científico cuestiona un estudio publicado en 2020 por falta de evidencias

Imagen de archivo de un fósil de dinosaurio
Imagen de archivo de un fósil de dinosaurioUNIVERSIDAD DE MÁLAGAUNIVERSIDAD DE MÁLAGA

Un investigador de la Universidad de Málaga cuestiona que el vuelo propulsado en animales apareciera en dinosaurios no avianos, con lo que refuta un estudio publicado en 2020 que concluía que había aparecido de manera independiente además de en las aves -el único linaje superviviente de dinosaurios-, en otros tres grupos de dinosaurios.

El científico Francisco Serrano, del departamento de Ecología y Geología de la UMA, refuta el hallazgo publicado en 2020 en la revista “Current Biology” por falta de evidencia científica en un artículo en esta misma publicación.

Según ha informado este martes la UMA, el vuelo propulsado en animales -impulsado por el batido de unas alas- es un modo de locomoción muy costoso energéticamente que requiere numerosas adaptaciones anatómicas y fisiológicas para llevarlo a cabo.

De hecho, la capacidad de desarrollar este tipo de vuelo, a diferencia del planeo que se da en muchos grupos de animales, solo ha aparecido cuatro veces en la historia evolutiva de los animales: en insectos, pterosaurios, aves y murciélagos.

El hallazgo publicado en 2020 tuvo gran repercusión, ya que ampliaba el número de vertebrados que habrían desarrollado este costoso medio de locomoción y, entre los dinosaurios, dejaba de ser exclusivo para las aves.

El investigador de la UMA, perteneciente al ‘Dinosaur Institute’ (NHMLAC) de Los Ángeles, refuta este hallazgo por falta de evidencia científica ya que, según destaca, los parámetros que usaron los autores para determinar la capacidad de vuelo no permiten discernir entre un vuelo propulsado y uno pasivo, frecuente este último en muchísimos más grupos de animales.

Para realizar este nuevo estudio, en el que ha trabajado junto con el paleontólogo Luis M. Chiappe, vicepresidente de Investigación y Colecciones del NHMLAC, han incorporado una comparación entre los parámetros medidos en animales actuales capaces de vuelo propulsado como las aves y murciélagos, y aquellos que planean, por ejemplo, las ardillas voladoras o los reptiles voladores, entre otros.

También han añadido nuevos datos respecto a la capacidad de generar energía desde los músculos, ampliando los que se habían tenido en cuenta en el estudio original.

“Las aves son un grupo de dinosaurios de los que conocemos fósiles de hace 150 millones de años, que ya tenían unas alas bien desarrolladas”, señala Serrano, que añade que entre los dinosaurios no avianos más emparentados con estas, también se conocen fósiles con alas lo suficientemente desarrolladas como para haberles proporcionado algún beneficio aerodinámico, ya sea para planear desde un árbol a otro, o para impulsarse para trepar y saltar obstáculos.

Pero, subraya el científico, “esto no quiere decir que fueran capaces de despegar batiendo las alas o de mantener un vuelo propulsado”.

Ambos autores concluyen que, aunque no se puede descartar que el vuelo propulsado apareciese en otros dinosaurios no avianos, la evidencia actual no permite apoyar la hipótesis propuesta en el estudio original de 2020.