Espadas sella el ciclo “susanista” en 40 días

El PSOE andaluz dejará de ser un continuo bullir de intrigas, o no. Pero eso es al menos lo que intentará su flamante nuevo secretario general, Juan Espadas. Ha tenido el camino despejado para hacerse con las bridas de la formación, después de que ganara las primarias para ser el cabeza de cartel de las próximas elecciones autonómicas con el 55% de los votos. Ningún socialista andaluz se ha arriesgado a ser la polilla que se chamusca contra una bombilla y no ha habido rival en las segundas primarias, por lo que hoy, la Comisión Regional de Ética ha certificado que el también alcalde de Sevilla ha sido elegido nuevo inquilino de la Secretaría General «por unanimidad» y descabalgando a Susana Díaz, quien, ya sin cargo orgánico, pondrá en septiembre rumbo a Madrid para ser senadora por designación autonómica.

En apenas 40 días se ha puesto fin al ciclo de Díaz, quien accedió por primera vez al liderazgo de los socialistas andaluces en 2013, en un congreso en Granada en el que obtuvo el respaldo del 98,6% de los delegados. Aunque pudiera parecer a veces lo contrario, en política nada es tan sólido como las rocas en un arroyo y ahora le toca el turno a Espadas, quien se ha rodeado de un equipo, compuesto por 12 mujeres y 10 hombres con una media de edad en torno a 40 años y de perfiles diversos, a los que coordinará el diputado por Jaén y portavoz adjunto del Grupo Socialista en el Congreso, Felipe Sicilia, presente durante meses en las quinielas sucesorias y el primero en amagar con intentar suceder a Díaz antes de que se impusiera el nombre del regidor de la capital hispalense.

Se les ha encomendado que practiquen la «escucha activa» en «cada rincón» de Andalucía y abran el «proceso de participación pública probablemente más grande que se ha hecho en la historia» de la comunidad «por una organización política» al que se podrá acceder por inscripción. Oirán sobre asuntos que «dejaron pendiente» cuando gobernaron y sobre lo que «no guste» del actual Ejecutivo regional que integran PP y Ciudadanos (Cs). El objetivo es convertir lo escuchado en el contenido de la ponencia que se llevará al 14 Congreso Regional fijado los días 6 y 7 del próximo noviembre primero, y luego en el programa electoral del PSOE-A.

Ese primer equipo, formado por alcaldes, concejales, figuras orgánicas ligados al municipalismo, una senadora, un diputado nacional y ex cargos públicos, «tendrá continuidad» con otro: la comisión organizadora del cónclave regional que se conocerá en breve. «Esto va a ser todo menos un clásico», ha aseverado Espadas, para añadir que llevarán a cabo un «ejercicio de innovación política». Busca que la formación adquiera formas «más modernas» y que, a partir de una colaboración «intensa» y un trabajo «estrecho» con las ocho secretarías generales provinciales, se hagan «propuestas muy concretas» sobre los temas que preocupan en la actualidad a la ciudadanía y que no son los mismos que la inquietaban en diciembre de 2018, cuando tuvieron que ceder las llaves del palacio de San Telmo –sede de la Presidencia de la Junta– después de 37 años y, con ellas, la gestión de un Presupuesto de más de 40.000 millones.

El secretario general ha dejado claro que el proyecto del PSOE-A será «municipalista, feminista, ecologista y combinará la juventud y la experiencia», además de ser «la izquierda que se va a enfrentar a la derecha». Se imprimirá a las siglas un «nuevo aire» para intentar recuperar el poder en una comunidad que fue durante décadas un bastión del socialismo. Para encauzar el camino Espadas tendrá las manos libres, ya que la Ejecutiva regional de Díaz permanecerá «en suspenso», dado que su actividad quedará «aglutinada» en la comisión organizadora del congreso. «Formalmente» ya «no funciona como tal», ha deslizado el alcalde Sevilla, quien asumirá sus competencias. Pese a ello, según fuentes del partido, el secretario de Organización, Juan Cornejo,ha renunciado a su puesto para «facilitar la transición» y «no estorbar», en línea con la actitud demostrada por Díaz durante el relevo.

Espadas no tiene escaño en el Parlamento andaluz y compatibilizará su tarea como candidato a la Junta y máximo dirigente del PSOE-A con la Alcaldía por una decisión «personal». El cambio en el consistorio se realizará «de forma ordenada» y «en los próximos meses». Se ha propuesto que se hable menos de lo orgánico, pero queda por delante un año de congresos en los que se tendrá que consolidar el paso de ciclo interno. «Aún quedan peleas», augura un histórico del partido, quien apunta en especial a provincias como Sevilla.