Negociación

Andalucía implica a los sindicatos por una financiación «justa»

Las centrales se desmarcan de la petición de la consejera, piden medidas concretas en la Atención Primaria y anuncian que mantienen la huelga para el día 26

La consejera de Salud, Catalina García, en el acto de bienvenida a los 103 nuevos Especialistas Internos Residentes (EIR)
La consejera de Salud, Catalina García, en el acto de bienvenida a los 103 nuevos Especialistas Internos Residentes (EIR) La RazónLa Razón

En un contexto político en el que la ruptura de la igualdad entre las comunidades autónomas es una amenaza clara, a raíz de la intención del Gobierno central de ofrecer a Cataluña una financiación singular, la Junta de Andalucía pidió la implicación de los sindicatos para reclamar un modelo «justo». Y lo hizo en el marco de una reunión con las centrales sanitarias, un ámbito en el que han saltado todas las alarmas debido al déficit de médicos. Un problema que se agravará en verano si no se toman medidas extraordinarias.

Así lo aseguró la consejera del ramo, Catalina García, tras un encuentro que mantuvo con Satse, el Sindicato Médico, CSIF, CC OO y UGT, trasladándoles que «únicamente trabajando juntos se podrán afrontar los desafíos actuales y garantizar una atención sanitaria de calidad a los andaluces». En la reunión, García instó a los sindicatos a reclamar «una financiación justa, que repercutirá en la mejora de la sanidad».

La titular de Salud y Consumo, que estuvo acompañada por la directora gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS), Valle García, y la directora de Personal del SAS, Carmen Bustamante, recordó las mejoras que ha experimentado el sistema público de salud en los últimos cinco años «en beneficio de los profesionales y de los ciudadanos andaluces». Así, subrayó que actualmente el sistema «cuenta con más profesionales, mejor remunerados y tienen mayor estabilidad».

Con respecto a esto último, señaló que cuando acabe el año 2024 la plantilla del SAS estará estabilizada al 94% a través de las ofertas de empleo pública y los concursos de traslado. Asimismo, calificó de «logro» que hayan desaparecido las agencias empresariales y ahora todos los centros sanitarios estén bajo el paraguas del SAS, con un proceso complejo de estatutarización de los profesionales de estas agencias.

Sobre los MIR y su situación excepcional este verano, comunicó que la intención de la Consejería de Salud y Consumo es, dentro de lo que contempla la ley, movilizar a los MIR a otros centros en zonas de difícil o de muy difícil cobertura con la posibilidad de que otro especialista fuese su tutor, no mermando así su formación, siempre dentro de la voluntariedad del residente. Igualmente, se va a ofrecer a estos MIR las plazas a las que podrán optar en septiembre para fidelizar al profesional en su futuro puesto de trabajo. Además, «se valorará un complemento».

Por otro lado, aseguró que la mayoría de lo propuesto en la Mesa Sectorial «se ha cumplido y que, por supuesto, vamos a seguir trabajando para cumplir el resto». Al hilo de esto, hizo hincapié en que los objetivos que contempla el Plan para la Mejora de la Atención Primaria continúan en fecha de cumplimiento. Por ello, instó a las organizaciones sindicales a seguir trabajando en el seno de la Mesa Sectorial, llegando a acuerdos.

«Reconozcamos lo que hemos conseguido entre todos y miremos hacia adelante», apostilló. En esta línea, apostó por una bolsa ágil, eficiente y transparente para los profesionales de la salud, con una nueva baremación negociada entre el SAS y las fuerzas sindicales.

Por su parte, las centrales se desmarcaron de la propuesta de la Consejería en relación a la financiación autonómica y anunciaron que mantienen la huelga prevista para el 26 de junio. «Es la única propuesta que trajo por escrito y ninguna organización la suscribió», aseguraron en un comunicado conjunto. Junto a ello, recordaron que sus reivindicaciones pasan por el cumplimiento de los pactos de Atención Primaria y la carrera profesional, el cumplimiento del pacto de Bolsa Única de Empleo y la solución a los despidos por la «nefasta política de contrataciones y sustituciones».