Arte

¿Cuál ha sido la única oferta por el Murillo de Abengoa?

El "San Pedro penitente de los Venerables" ha salido a subasta con la premisa de que está declarado como bien de interés cultural

El "San Pedro Penitente"
El "San Pedro Penitente"La Razón

La fundación Fondo de Cultura de Sevilla (FOCUS) ha presentado la única oferta para adquirir la obra 'San Pedro penitente de los Venerables', de Bartolomé Esteban Murillo, cuadro que ha salido a subasta por la liquidación de los bienes de Abengoa, y que, precisamente, custodia esta fundación en el museo del Hospital de los Venerables de Sevilla.

Según han informado a EFE fuentes judiciales, la oferta de FOCUS, de 2,5 millones de euros, fue la única que se presentó al concurso, cuyo plazo de recepción de candidaturas a quedarse con la obra terminó a las 14:00 horas del pasado viernes, y ahora será estudiada, con la previsión de tomar una decisión sobre la misma esta semana.

El cuadro ha salido a subasta con la premisa de que está declarado como bien de interés cultural (BIC), por lo que no puede salir del territorio español, y que quien quiera adquirirlo tiene que certificar el pago del 75 % del valor de tasación de la obra, que asciende a ocho millones de euros.

Una vez estudiada la oferta, en caso de que no sea aceptada, se abrirá una segunda fase consistente en una subasta tradicional realizada por una empresa especializada, de las que ya se están recibiendo solicitudes para optar a este trabajo.

La obra representa al apóstol San Pedro como primer sacerdote de la iglesia, justo en el templo del hospital de los Venerables, dedicado al cuidado de los sacerdotes ancianos, "los venerables casi santos", como se explica cuando se pregunta por el nombre de este edificio situado en el corazón del barrio sevillano de Santa Cruz.

Pintado hacia 1675 por encargo del canónigo Justino de Neve, este óleo sobre lienzo permaneció en Sevilla hasta el año 1810, cuando fue expoliado durante la invasión napoleónica, aunque regresó a España en 2014 casi por casualidad, ya que fue localizado en un castillo escocés propiedad de una familia iraní.

Los expoliadores, además, se llevaron solo el lienzo y dejaron el marco original abandonado, que hoy día está expuesto en la iglesia del hospital como una obra de arte en sí mismo, mientras que el cuadro conserva el marco que tenía cuando fue localizado en Escocia, aunque restaurado, igual que la obra de Murillo.