Una británica denuncia la insensibilidad del hotel en Ibiza en el que murió su novio por una caída: "La música volvió a sonar al poco"

La muerte de Evan Thomson, un joven escocés de 26 años que falleció tras caer desde un sexto piso en el hotel Ibiza Rocks, ha generado críticas hacia el comportamiento del establecimiento en las horas posteriores al trágico accidente.

Según relataron sus amigos en medio británicos, Thomson se encontraba celebrando su cumpleaños junto a ellos en Ibiza cuando ocurrió el suceso, en la madrugada del 7 de julio. Los servicios de emergencia acudieron al lugar alrededor de las 6 de la mañana, pero no pudieron salvarle la vida. Fue declarado fallecido en el mismo lugar de los hechos.

"Fue como si nada hubiera ocurrido": indignación entre los amigos

Lo que más ha indignado a los allegados del joven es la manera en que el hotel gestionó la situación tras la tragedia. La pareja de Evan, Remi Duncan, de 23 años, expresó su consternación por lo que considera una absoluta falta de consideración: “Fue repugnante. Apenas pasó tiempo desde la muerte de Evan y ya se escuchaba de nuevo la música. Fue como si no hubiera pasado nada. Te revuelve el estómago”.

Uno de los amigos del fallecido, Blair Robertson, de 25 años, también manifestó su disgusto. Según relató, solo 90 minutos después del suceso ya se estaban utilizando máquinas de limpieza a presión para eliminar rastros del accidente. "Escuchar el lavado a presión desde abajo fue devastador. Todo indicaba que querían volver a la normalidad lo antes posible. Fue un golpe muy duro para nosotros", explicó.

Los amigos afirmaron que estuvieron durante una hora sin recibir explicaciones tras ser informados de la muerte de Evan. Más tarde, fueron escoltados a sus habitaciones para recoger sus pertenencias y trasladados a otro hotel cercano. “Nos sacaron del hotel a eso de las 9 de la mañana. Querían reanudar la fiesta, como si nada hubiera pasado”, añadieron.

Otro compañero, James Shan, lamentó que el hotel priorizara su imagen y sus eventos antes que mostrar respeto por la víctima: “Fue como si lo vieran todo desde un punto de vista comercial. Publicaron en redes sociales anuncios de la próxima fiesta pocas horas después. Fue enfermizo”.

Desde el hotel Ibiza Rocks se emitió un comunicado en el que calificaron la muerte de Evan como “una situación extremadamente triste y trágica”. Aseguraron haber colaborado con las autoridades en todo momento y ofrecido apoyo continuo a los amigos del fallecido mediante su equipo de atención al cliente, incluso proporcionando un número directo para contactar con la familia.

Pese a estas afirmaciones, la familia y amigos de Evan mantienen su indignación y piden explicaciones claras. Su madre, Lel Kellighan, expresó su dolor a través de redes sociales: “Con el corazón roto os tengo que contar que mi hijo Evan sufrió un trágico accidente durante sus vacaciones en Ibiza y lamentablemente falleció. Estamos destrozados. Os pedimos un poco de tiempo”.