Historia

Trabaja remoto desde una cueva milenaria en España, un lugar mágico y con wifi

Estas viviendas excavadas en las rocas están viviendo una segunda juventud

Casa-cueva en Gran Canaria
Trabaja remoto desde una cueva milenaria en España, un lugar mágico y con wifiAirbnb

En medio del eterno clima primaveral por el que siempre destaca el Archipiélago canario, se esconde un legado aborigen que, lejos de pertenecer solo al pasado, se ha reinventado como una alternativa de vida y turismo sostenible: las casas-cueva.

Estas viviendas excavadas en la roca, ubicadas en Risco Caído y las Montañas Sagradas de Gran Canaria (declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2019), están viviendo una segunda juventud. Lo que en su día fue refugio natural para los primeros pobladores de la isla, hoy se convierte en un oasis moderno para viajeros, nómadas digitales y amantes de la desconexión..

Un clima privilegiado, pero con matices

Aunque Canarias siempre ha presumido de un clima agradable durante todo el año, cuando incluso en verano el calor extremo resulta más llevador que en otras regiones de España, las olas de calor de origen subsahariano que ocasionalmente alcanzan islas como Tenerife o Gran Canaria pueden hacer que incluso los residentes busquen un respiro. En este contexto, las casas-cueva cobran un nuevo valor, ya que gracias a sus paredes de piedra y su integración con el terreno, mantienen una temperatura interior fresca en verano y templada en invierno, sin necesidad de aire acondicionado.

Décadas atrás, cuando la tecnología aún no alcanzaba ni a imaginar el confort moderno que actualmente nos rodea, fue el ingenio arquitectónico prehispánico el que permitió habitar estos espacios con inteligencia climática. Hoy, ese mismo diseño ancestral conquista a nuevos públicos.

Dormir entre historia y naturaleza

Uno de los ejemplos más representativos es la casa-cueva de Las Maguadas, ubicada en Acusa Seca, en el municipio de Artenara, el más alto de la isla. Rodeada de barrancos, vestigios arqueológicos y formaciones volcánicas, esta vivienda está disponible en plataformas como Airbnb y promete a sus huéspedes una experiencia única: la posibilidad de vivir, literalmente, dentro de un patrimonio mundial, sin renunciar al confort.

Con apenas mil habitantes, Artenara ofrece una paz difícil de encontrar, ideal para quienes buscan aislarse del bullicio, reconectar con la naturaleza o incluso trabajar en remoto. Porque sí, estas casas también tienen wifi.

Una mirada al pasado con raíces al futuro

Más allá del turismo de sol y playa, las casas-cueva de Gran Canaria son hoy una nueva forma de vivir y viajar. Alejadas del consumo masivo, estas casas, cargadas de historia y dotadas de todas las comodidades modernas son una la invitación perfecta que necesitas para explorar las islas como para teletrabajar.

Quizá por eso los nómadas digitales las eligen como lugar de residencia temporal. Porque trabajar entre rocas volcánicas y cielos despejados, donde cada atardecer es un espectáculo, no solo mejora la productividad: transforma el modo en que entendemos el tiempo, el espacio y el descanso.