Más dinero para los bolsillos

Más dinero en los bolsillos de los contribuyentes castellanos y leoneses. En concreto, 52 millones en dos años es lo que se ahorrarán tras la eliminación casi total del Impuesto de Sucesiones y Donaciones iniciada por la Junta. Esta medida, que busca establecer un sistema fiscal favorable entre familiares directos «debe servir de ejemplo al Gobierno de Sánchez para hacer lo mismo», consideró el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo.

El proyecto de Ley supone acabar prácticamente con esta tasa al reducir el 99 por ciento el coste fiscal al que se encuentran sometidas las adquisiciones de bienes y derechos por herencia o donación entre familiares directos, cónyuge, descendientes y ascendientes. La medida puede beneficiar a entre 5.000 y 15.000 ciudadanos de la Comunidad.

En este sentido, Fernández Carriedo explicó en un acto en Salamanca que esta iniciativa no tendrá influencia en los impuestos derivados por la plusvalía y el incremento patrimonial del año siguiente, figuras impositivas correspondientes al Estado.

Además de esta medida, el consejero explicó también que «no será la única reducción de tasas de la legislatura», ya que la Junta cuenta con un «muy ambicioso programa de apoyo fiscal en el ámbito rural» que es «fruto del acuerdo parlamentario entre Partido Popular y Ciudadanos.

La idea es tener un «tratamiento favorable hacia estas zonas, desde el IRPF hasta el impuesto de transmisiones patrimoniales», como forma de «estímulo para pedirle al Ejecutivo central un apoyo a los pueblos puesto que «merece la pena respaldarlos de una forma específica y diferenciada desde el punto de vista impositivo.

El conflicto del IVA

En cuanto al conflicto de las Comunidades Autónomas con el Estado por la liquidación del IVA, el responsable de Economía y Hacienda afirmó que la Junta no quiere «más deuda y déficit», sino que el Gobierno «pague lo que debe» desde 2017 -142 millones-, tras la propuesta del Ejecutivo central de asumir la ampliación del margen de deuda de las Autonomías para no tener que hacer frente a lo debido a los gobierno regionales, como propuso la ministra en el pasado Consejo de Política Fiscal y Financiera.

«Nosotros no hemos asumido ese margen de más déficit porque nos parece injusto que la solución a que no se nos pague algo sea siempre que se nos permita endeudarnos más», explicó Carriedo, quien afirmó que la solución deseada por la Junta pasa por dos cuestiones: «Un nuevo modelo de financiación autonómica que garantice la prestación de servicios y el abono de lo adeudado a las Comunidades».

Además, recordó que «las personas de Castilla y León han pagado el IVA, el Estado lo ha cobrado, la Junta ha pagado esos servicios públicos, pero el Gobierno no ha pagado su parte de Impuesto sobre el Valor Añadido para financiarlos, se lo ha quedado», lo que, según Fernández Carriedo, «hace incurrir a todas las Autonomías en un gasto que no tenemos financiado».

Por ello, insistió en que le parece «profundamente injusto» que la «única alternativa» planteada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez «no sea pagar lo que se debe, sino dejarnos tener más deuda». «Somos contrarios a esa solución porque tienen que hacer frente a sus compromisos y a un nuevo sistema con futuro», concluyó.