Ganadería
Los ganaderos, en peligro de extinción por la sobreprotección del lobo
El sector protesta en coche por las calles de Zamora para mostrar su malestar por la decisión de Sánchez de impedir su caza al norte del Duero y advertir de los daños al campo y al medio ambiente
Alrededor de ochenta vehículos han cortado este miércoles algunas calles del centro de Zamora durante una protesta del campo organizada por las organizaciones agrarias Coag, Asaja y UPA para mostrar su malestar ante la decisión del Gobierno de España de impedir la caza del lobo también al norte del río Duero, pedir a Sánchez que rectifique y no elimine esta herramienta del centro poblacional de esta especie cuando provoque daños y para advertir de los graves daños que esta sobreprotección del lobo provocará a la ganadería extensiva así como al Medio Ambiente en forma de incendios además del aumento de accidentes de tráfico.
Bajo el lema “Menos lobos y más ganaderos”, la comitiva, encabezada por un tractor, recorría varias calles de la capital zamorana con sonidos de claxon y quejas a una medida a la que se oponen las Comunidades Autónomas con mayor población de esos animales como son Castilla y León, Asturias, Galicia y Cantabria, que consideran desproporcionada e injusta además de fatal para el desarrollo rural y contraria al objetivo general de fijar población en los pueblos. “Los ganaderos, las vacas y las ovejas también tenemos derecho a vivir y nadie de fuera tiene que decirnos lo que tenemos que hacer”, gritaba, megáfono en mano, uno de los ganaderos que participaba en la protesta.
El secretario general de UPA en Castilla y León, Aurelio González, recordaba que solo en Castilla y León se producen siete ataques del lobo al día, lo que genera que siete ganaderos “piensen cada día tirar la toalla”, mientras que desde Coag, el presidente provincial de la Coordinadora Agraria en Zamora, Lorenzo Rivera, aludía al “fanatismo” de los grupos ecologistas que han promovido el cambio de estatus del lobo, lo que causará un “daño irreversible” al sector agroganadero.
Además, ponía de relieve que en Castilla y León hay una población de unos 1.500 lobos y el cupo de caza estaba fijado en unos 113 lobos, el 7,5 por ciento del total, aunque luego nunca se llegaba a esa cifra máxima, y comparaba la situación en España con la que existe en Francia, donde con una población de 500 lobos, se caza el 17 por ciento del total, “cuando la directiva de hábitats europea es la misma”.
Ataques en Burgos
Por otra parte, Asaja ha denunciado este miércoles el “alarmante” incremento de los ataques de los lobos a la cabaña ganadera en la provincia burgalesa donde precisan que se han producido al menos cinco ataques en la última semana.
En un comunicado de prensa, la organización agraria ha recordado que hace quince días el lobo atacó a ovejas en el casco urbano de Espinosa de los Monteros. Y en la última semana se han registrado ataques de los lobos a terneros en Rozas de Valdeporres y Herbosa, potros en Quisicedo y la Merindad de Sotoscueva, y ovejas en Redondo de Sotoscueva.
Asaja considera que el problema de los ataques del lobo, lejos de tener visos de solución, se ve agravado por la decisión del Ministerio de Transición Ecológica de incluir a este animal en el listado especial de especies protegidas, que supone la prohibición de cazar lobos en las zonas de mayor expansión de este depredador, como es el norte de la provincia de Burgos.
A su juicio, se está produciendo la paulatina desaparición de la ganadería tradicional y de los ganaderos, por lo solicitan la retirada de la decisión del Ministerio de incluir el lobo como especie protegida, además de indemnizaciones justas por los ataques recibidos.
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